Análisis | Ark: Survival Evolved

Después de llevar varios años en Early Access en PC, Ark Survival Evolved llega en su versión completa a nuestras Playstation 4.

Ark: Survival Evolved no pudo lanzarse en el mejor momento, año 2015, en pleno apogeo de Youtube y las redes sociales y con el hype por el estreno de Jurassic World ( no tiene nada que ver pero basa su temática en los dinosaurios). No tardaron en salir cientos y cientos de vídeos de gente en el juego, ya sea intentando descubrir sus secretos o simplemente por diversión.

Los chicos de Wildcard estuvieron añadiendo contenidos periódicamente durante unos dos años, ahora nos llega su versión final a nuestras Playstation 4 con la misma propuesta que ya recibieron los de PC en su día.

Pudiendo jugar en solitario o en un servidor multijugador, crearemos un personaje mediante un editor con bastantes opciones ( aunque los resultados siempre nos han parecido algo «extraños») para sobrevivir en la isla y descubrís sus numerosos misterios.

Una vez creado el personaje apareceremos en la costa de una isla ( podemos escoger donde aparecer realmente, pero lo recomendado es este) repleta de dinosaurios, algunos mansos y otros feroces.

Nosotros, iremos completamente desnudos y desarmados, por lo que nos tocará ir recolectando objetos y materiales para crearnos vestimentas, armas y sobrevivir a las inclemencias del tiempo, ya sea el frió o el calor.

Para recolectar estos materiales recorreremos a algo bastante típico en este tipo de juego, golpeando con nuestros puños desnudos ( nos haremos con picos, hachas y más armas que os sorprenderían) los diferentes arboles así como podremos ir recogiendo del propio terreno alimento o más elementos.

También necesitaremos estas armas para atacar y defendernos de los dinosaurios, que tendrán un nivel concreto y no dudarán en defenderse o atacarnos los más agresivos, pero todo tiene recompensa, por cada derrota, por cada logro, obtendremos experiencia. Esto se traduce en que iremos subiendo de nivel y podremos repartir los puntos para mejorar diversos aspectos de nuestro personaje, desde la salud o la capacidad para mantener el oxigeno debajo del agua, pasando por la capacidad de carga de nuestro inventario y un sin fin más de opciones.

También deberemos ir desbloqueando los diferentes engramas que son algo así como los planos que nos permitirán construir nuevos objetos de utilidad, como una hoguera para protegernos del frio o ropa para vestirnos.

Además, y una de las cosas más valoradas del juego, es la capacidad de poder domar a los dinosaurios para poder montar en ellos en cuanto queramos, imaginaos ir sobre un Tiranosaurio Rex por los bastos escenarios del juego.

No solo eso, si no que la palabra Evolved viene por algo, y es que aunque de entrada parezca que vivimos en una época prehistórica, podremos ser capaces de ir evolucionando poco a poco hasta pasar del hacha a una metralleta o una torreta, algo que mucha gente se pierde al no avanzar en el título.

Por supuesto nuestra recomendación es que juguéis siempre el modo multijugador, el modo para un jugador se nos antoja aburrido y con poca variedad ya que tendremos que hacer todo nosotros solos muy poco a poco.

Sin embargo, en el modo multijugador podremos compartir nuestras experiencias con otros jugadores. Aquí podremos unirnos a diversas tribus, con las que podremos vivir innumerables aventuras e incluso construir nuestras propias fortalezas así como defenderlas, por lo tanto es mucho más divertido.

No cabe duda que lo mejor de Ark: Survival Evolved es la cantidad de contenido que atesora, desde los diferentes escenarios, la ingente cantidad de creaciones así como lo que nos deje nuestra imaginación, en nuestras creaciones y nuestras propias aventuras.

A nivel técnico, el juego, construido con Unreal Engine 4 sorprende por su enorme belleza, los escenarios son muy coloridos así como los efectos de iluminación y el follaje de las junglas es impresionante, más aún si lo disfrutamos en Playstation 4 Pro.

Los dinosaurios también son imponentes, desde su diseño, que reconoceremos la mayoría solo viéndolos así como su enorme tamaño, donde nos sentiremos insignificantes al lado de algunos de ellos.

No todo es maravilloso, y es que el juego aún cuenta con algunos errores gráficos y comportamientos erráticos de los dinosaurios. Lo mismo un dinosaurio no nos hará ni caso, que un segundo después nos atacara indiscriminadamente, persiguiéndonos hasta eliminarnos. Algunos simplemente se quedarán dando vueltas sobre si mismos, dando una sensación algo extraña. Eso si, sabemos que WildCard está trabajando en nuevos parches para ir mejorando la experiencia.

Otro problema, que afecta sobre todo a consola es la interfaz, se nos hace demasiado complicada y engorrosa, llena de casillas y elementos que incluso con la traducción al español, se sobre ponen frases sobre otras. La traducción en según que ocasiones deja bastante que desear, incluso con vocablos sin traducir, esperemos que lo mejoren con el tiempo.

El sonido es bastante notable, las pocas melodías son de corte épico y de bastante buena calidad, y pese a que la mayor parte de la partida impera el silencio, el sonido ambiente esta muy bien recreado, sintiéndonos en todo momento en un lugar desértico habitado por mucha fauna.

No cabe duda de que Ark: Survival Evolved tiene un gran trabajo detrás. Si bien es cierto que no es un juego apto para todo tipo de público, ya que requiere de mucha paciencia y muchas horas, ya que no se basa en una historia lineal si no en prácticamente crear nuestra propia aventura.

Una vez superado o asumido este planteamiento, Ark propone multitud de horas de exploración, acción y sobre todo, diversión con los amigos en un juego que sabe transmitir a la perfección lo que promete,sobrevivir, sin más.

ARK: Survival Evolved

69,99 €

8.1

Duración

8.6/10

Jugabilidad

7.6/10

Gráficos

8.0/10

Sonido

8.3/10

Diversión

8.0/10

Pros

• Horas y horas de contenido y cosas por hacer
• Muy divertido jugando con amigos.

Cons

• Muy divertido jugando con amigos.
• Algun que otro bug y comportamiento extraño de las criaturas.