Análisis | Divinity: Original Sin Enhanced Edition

Llega a consolas uno de los juegos de rol más grandes e importantes de los últimos tiempos: Divinity: Original Sin Enhanced Edition. Todo amante del género no puede dejar pasar esta semejante obra maestra cuidada en cada uno de sus aspectos.

Ficha Técnica

Título: Divinity: Original Sin Enhanced Edition Estudio desarrollador: Larian Studios Distribuidor: BadLand Games Número de Jugadores: 1-4 Plataformas: PlayStation 4 y Xbox One PEGI: +16 Fecha de salida: 27 de octubre de 2015 Idioma: Textos en español. Voces en inglés Cómpralo por tan solo 47,95€: Divinity: Original Sin – Enhanced Edition Género: Rol, RPG

Recuperando el espíritu de la vieja escuela, el título de Larian Studios derrocha calidad tanto en su profundo sistema de combate como la libertad que ofrece. Dificilmente podemos imaginar todo el trabajo que ha tenido que realizar el estudio para adaptar un título tan clásico de PC a consolas. Pensado para usar teclado y ratón, todos los controles, menús y mecánicas se han pasado a los mandos de PlayStation 4 y Xbox One con mucho acierto tras un buen número de horas jugadas a Divinity: Original Sin Enhanced Edition.

Como nosotros no tuvimos la oportunidad de probar la versión original de PC, comentamos a continuación todos y cada uno de los detalles del global, aunque haciendo mayor hincapié en todo lo que introduce esta Enhanced Edition. En un principio se puede resumir en la inclusión de pantalla partida, más voces para personajes, un número superior de misiones, equilibrios, inteligencia artificial mejorada e incluso cambios argumentales y gráficos. Además, cabe destacar que Divinity Original Sin: Enhanced Edition es el primer videojuego del género RPG en incluir un modo cooperativo en pantalla partida local, además de otro modo cooperativo online.

Lo primero que debemos hacer antes de embarcarse en esta inolvidable aventura es dar forma a los dos héroes principales con los que se inicia la partida. A la hora de configurar la ficha de cada personaje, se debe escoger su clase, habilidades de combate, características y repartir puntos de atributos. Todo ello lleva su tiempo si de verdad deseas marcar a conciencia la personalidad, apariencia y estilo de cada protagonista. A nivel estético es donde menos opciones se ofrecen, algo que tampoco es determinante debido a la continua vista aérea que se utiliza.

La profunda y épica historia de Divinity Original Sin: Enhanced Edition se remonta a los primeros días de Rivellon, teniendo lugar mucho antes que lo acontecido en las dos primeras entregas de la saga, Divine Divinity y The Dragon Knight Saga. En él, el jugador formará parte de un mundo abierto amplísimo en el que podrá explorar diversos ambientes, y tendrá que enfrentarse a innumerables criaturas y recoger montones de artículos. No vamos a destriparos la aventura pues sería echar por tierra gran parte del encanto del juego, aunque si cabe comentar que nos sorprende en ningún momento. Una trama repleta de tópicos de otras obras del género que es cierto que está hilada, pero se encuentra un peldaño por debajo del conjunto del juego. Este punto mejora si se tiene en cuenta la magia de la aventura y todas las demás historias secundarias, que casan perfectamente entre ellas y crean una base que te hacen permanecer enganchado de manera constante sin perder el interés

Lo bueno de este magnífico viaje son todas las aventuras que se viven durante ese tiempo, llenas de épica, personalidad y mucho mimo al ser recreadas, siempre recordando que se puede crear tu propia historia por la influencia de las decisiones. Esto es en gran parte gracias al magnífico nivel que presentan los restantes apartados de Divinity: Original Sin Enhanced Edition.

Como buen juego de rol cásico, Larian Studios siempre evita llevarnos de la mano y tras la finalización del tutorial de inicio hay que buscarse la vida hablando con todo el mundo para encontrar el camino correcto hacia el siguiente movimiento. Un buen consejo es tener al lado papel y lápiz para apuntar ciertas cosas que posteriormente pueden ser importantes. Divinity: Original Sin Enhanced Edition anima constantemente a explorar y entablar conversaciones con los lugareños ya que en el lugar más inhóspito esconde el tesoro o misión más relevante de la historia. Hay miles de ejemplos donde las habilidades o poderes de los personajes son la clave para avanzar, y la mecánica de prueba y error en muchas ocasiones es la única salida.

Esto propicia que exista una cantidad casi infinita de puzles y situaciones a lo largo del juego. Divinity: Original Sin Enhanced Edition no está lleno de habituales mazmorras donde el único objetivo es limpiar la zona de enemigos, sino que aquí hay que pensar pues las trampas, secretos, misterios y más de una sorpresa hay escondida en cada rincón del escenario.

El sistema de combate aunque se nota claramente que estaba pensado originalmente para PC, ha sido adaptado de forma notable. A las pocas horas de haber comenzado se maneja el Dualshock 4 sin ningún tipo de problemas, aunque si se nota menos ágil. A largo plazo no es ningún inconveniente por el ritmo pausado que tiene el juego durante las batallas. Durante cada turno tenemos un número limitado de puntos de acción que marca los movimientos o ataques podemos realizar. Ya sea desplazarse, uso de ítems o emplear una determinada habilidad, magia o ataque consumirá puntos. Eso sí, este aspecto también tiene su parte de estrategia, pues si en alguna ocasión nos sobran varios de ellos antes de terminar nuestro turno, se acumulan para el siguiente y así llevar cabo más ataques contra los enemigos.

Controlando esta base sabremos enfrentarnos a cualquier situación del juego, ya que las magias no consumen maná, y solo hay que recordar que las habilidades requieren tiempo antes de poder utilizarse de nuevo. Pero no todo radica en lo contado, sino que lo interesante aparece al saber que los escenarios se emplean a nuestro favor en ciertos momentos y los parámetros a vigilar se incrementan considerablemente. Cuando uno de los personajes se encuentra en una balsa de aceite, su velocidad de movimiento se ve paliada, y además es propenso a un ataque ígneo. El agua conduce la electricidad y tal elemento es doblemente poderoso en tales circunstancias, al igual que el hielo resbala o el gas es inflamable.

Multitud de combinaciones, estados alterados y rivales con ataques de todo tipo convierten Divinity: Original Sin Enhanced Edition casi en una partida de ajedrez, donde el posicionamiento es vital para salir bien parado. Este sistema aporta una pausa y táctica que en la actualidad no estamos habituados a ver, pues hay que pensar cada gestión, y más teniendo en cuenta que existe el fuego amigo con los restantes miembros del grupo.

En total tenemos más de 40 horas de puro rol por delante que se pueden exprimir en varios niveles de dificultad. El modo normal ofrece una aventura asequible pero con desafíos más que respetables. No obstante, si queréis un reto más propio de los títulos clásicos también se puede escoger el modo difícil, donde el botón de guardado pasa a ser el elemento más importante pues se elevan y mucho los problemas para avanzar. Todo ello se puede disfrutar tanto en solitario como en cooperativo. Hacerlo a solas tienes su encanto, pero jugar mano a mano con un familiar o amigo a pantalla partida en una misma consola es algo insuperable. Esta es una de las principales novedades que introduce Divinity: Original Sin Enhanced Edition, una característica perfecta para quién no le agrade el modo online.

La cooperación en un título como este es primordial, y si antes de hacer cualquier cosa queda todo hablado pues mucho mejor. Es útil para explorar una zona más rápido o recoger todos los recursos del escenario. Eso sí, no es recomendado separarse en exceso del compañero pues en un instante te puedes ver rodeado de cualquier peligro.

Gráficamente estamos ante un título que resuelve a la perfección lo que desea plasmar en pantalla. En su apartado técnico hay texturas de una calidad pobre, al igual que en ciertos efectos y animaciones. Al margen de las mejoras visuales de esta edición que han servido para rehacer ciertos detalles, donde realmente saca músculo Divinity: Original Sin Enhanced Edition es en su faceta artística. Nunca vemos dos escenarios idénticos, y es que además de ser muy bonitos son variados y están repletos de vida. El diseño de los personajes y criaturas está muy conseguido, si bien en parte se pierde la esencia por la vista aérea de la cámara.

Esta magistral obra la cierra no sin menos calidad su apartado sonoro. Larian Studios nos brinda un buen repertorio de melodías que se adaptan notablemente a cada situación. Hay temas contundentes pero faltan toques épicos en las batallas más emocionantes del viaje, sobre todo en los jefes finales donde se usan los mismos sonidos que ante enemigos normales. La revisión que introduce Enhanced Edition trae consigo la inclusión de actores de voz (en inglés) al completo para los diálogos con personajes secundarios. Hasta ahora solo se podían leer los textos, y se agradece esta grandiosa faena que aporta mayor inmersión todavía. Queremos terminar este análisis haciendo referencia a la magistral y laboriosa traducción al castellano, un trabajo digno de mención que no podemos más que agradecer eternamente. Son miles de líneas las que han sido localizadas a nuestro idioma en un sinfín de conversaciones divididas en el gigantesco mundo de Rivellon, y seguramente el grupo de traductores recordará esta labor como una de las más complicadas y a su vez satisfactorias.

Conclusión

Pocos inconvenientes se pueden encontrar en una obra tan cuidada como Divinity: Original Sin Enhanced Edition. Si alguna vez habéis amado los juegos de rol clásico no podéis dejar pasar esta magnífica oportunidad. Derrocha contenido y libertad por todos los costados, pues no existe tiempo para el aburrimiento. Vale que su argumento no se recordará en el futuro, pero sus misiones están perfectamente hiladas. Ya lo comentaron los usuarios de PC exactamente hace un año y ahora lo reiteramos en su versión de PlayStation 4, es un título sobresaliente y una de las mejores aventuras que se han encontrado en mucho tiempo. Es una gozada explorar el mundo de Rivellon, perderse por sus profundos escenarios y combatir en su genial sistema por turnos. Divinity: Original Sin Enhanced Edition tiene una esencia especial que lo hace único y a estas alturas es complicado encontrar un juego del género superior a la labor desarrollada por Larian Studios.

Divinity: Original Sin Enhanced Edition

49,99€

9

Historia

8.0/10

Jugabilidad

9.5/10

Gráficos

8.5/10

Sonido

9.0/10

Duracion y Diversión

10.0/10

Pros

• Espléndido sistema de combate por turnos
• Componente estratégico y su modo cooperativo online o local
• Infinita interacción con los escenarios en batallas y puzles
• Diálogos magistrales. Una traducción perfecta.
• Gran trabajo de adaptación a consolas

Cons

• Interfaz un tanto mejorable
• La historia no está al nivel del resto del juego
• No es una aventura recomendada para todos los públicos