Análisis | FlatOut 4: Total Insanity

FlatOut continua dando guerra con esta cuarta entrega de la franquicia y primera en las consolas de actual generación¿Preparados para arrancar motores y enfrentarnos a las carreras y pruebas más alocadas del mundo del motor?

FlatOut es una longeva saga de conducción creada en 2004 y que cosecho un éxito bastante destacable en la generación de PS2, seguido de varias secuelas de mayor o menor calidad. Un juego de conducción completamente arcade donde la diversión radica en hacer las cosas más alocadas que se nos ocurran. Un juego gamberro y rebelde que ahora lanza su nueva propuesta para nuestras Playstation 4 con este FlatOut 4 : Total Insanity.

El equipo de desarrollo francés Kylotonn son los encargados de esta nueva entrega de la saga, sustituyendo a los originales Bugbear. En este caso el título no trata de revolucionar el género o la franquicia si no continuar haciendo lo que mejor sabe adaptándolo a las tecnologías actuales, entretener y divertir sin más pretensión.

La mecánica de FlatOut 4 es sencilla, tenemos varios modos de juego tanto para un jugador como para varios jugadores . Participaremos en carreras donde como es habitual competiremos con varios rivales tanto offline como online para llegar al primer puesto. Pero aquí vale todo, desde descubrir atajos en los circuitos hasta golpear y destruir a los rivales. No solo es una opción golpear a los rivales, si no que nos servirá para rellenar nuestra barra de turbo imprescindible para adelantar posiciones.

En el modo carrera iremos comprando y mejorando nuestro coche entre varios tipos distintos ( no son muchos y algunos son simplemente cambios estéticos de los originales) y compitiendo en varias carreras por unos circuitos muy amplios. Pero esta amplitud no siempre es buena, al haber atajos y tanto caos en pantalla, muchas veces nos hemos encontrado literalmente perdidos por el circuito. No saber en que dirección ir o encontrarnos curvas de sopetón será el plato de cada día en el juego.

Estos circuitos son variados en estética, desde zonas desérticas, pasando por entornos nevados o factorías. Quizás no hay un gran numero de circuitos, aunque estos son bastante largos, habiendo carreras de más de 5 minutos y que es posible que haga que pierda un poco el frenetismo que debería tener un juego de estas características.

Pero no solo de carreras vive Flatout 4, el juego contiene numerosas pruebas a cada cual más alocada para hacer en solitario o incluso compartiendo un solo mando por turnos con uno o varios amigos. Pruebas que se podrán hacer de forma individual o cumpliendo los objetivos que nos ofrece las 42 variantes que nos ofrece el título.

Tendremos un modo batalla donde nuestro objetivo es destruir el mayor número de coches posible, con diversos potenciadores de turbo, defensa o ataque para usar a nuestro favor o ponerse en nuestra contra. Quizás estos escenarios, sobre todo si encontramos poca gente online ( que son cuadriláteros con diferentes estéticas) son demasiado grandes para la cantidad de coches que hay. Nos hemos encontrado a veces batallas donde no lograba nadie atinar a nadie, pareciendo más la atracción de los coches locos que un modo batalla tal cual.

También contamos con otros modos , todos basados en la misma premisa. Lanzar a nuestro conductor hacia diferentes objetivos. Pese a que estas pruebas de entrada no están del todo bien explicadas, una vez aprendidas las diferentes mecánicas probablemente será el modo que más nos divierta, sobre todo cuando estemos acompañados de varios amigos.

Estas pruebas van desde lanzar a nuestro conductor cual balón de fútbol para marcar gol, hacerlo pasar por aros de fuego, jugar a golf intentando colarlo en un hoyo o incluso lanzarlo contra un bate de béisbol gigantesco para rebotar y caer en alguno de los guantes gigantes.

Estos son unos ejemplos de todas las pruebas que hay, que son bastantes más. Podremos crear diferentes ligas decidiendo que pruebas queremos que estén y cuales no, por lo que podemos jugar solo las que más nos gusten y dejar de lado las que no sean de nuestro agrado.

Sobre el modo online, no sabemos si es por el reciente lanzamiento del juego pero nos ha resultado muy difícil encontrar partidas, y cuando las hemos encontrado estas nunca llegaban a tener más de 5 competidores. Esperemos que con el tiempo se vaya incorporando más gente al juego y podamos disfrutar de un modo online más dinámico y divertido.

Técnicamente estamos ante un juego que deja claro desde el principio que no se trata de un juego triple A . Con unos gráficos que cumplen sin más, unos escenarios bastante vistosos y unos coches que sin destacar demasiado si que están bien diferenciados. Quizás el problema más grave son las físicas de los vehículos. Estos no reaccionan del todo bien, en especial a los golpes, y eso es algo bastante incomodo en un juego que centra gran parte de sus mecánicas en ese concepto.

El apartado sonoro es irregular, con una banda sonora rockera bastante amena y que intenta inspirar el estilo gamberro y rebelde del título, podremos escoger con un solo botón saltar la canción hasta encontrar alguna de nuestro agrado. Por contra los efectos de sonido son bastante flojos, con un sonido de motores bastante flojo e irreal , unos golpes muy pocos contundentes para lo que vemos en pantalla y un conjunto en general bastante flojo.

FlatOut 4 : Total Insanity es un juego divertido sin más, sobre todo para el más fanático de la saga que lleva bastantes años sin recibir una nueva entrega. No destaca en nada ni pasará a la historia de los juegos de conducción pero cabe decir que nos hará pasar buenos ratos y es un juego ideal para pasar una tarde de diversión con los amigos.

Con esto no queremos decir que esta nueva entrega de FlatOut sea mala en absoluto, es más, hará las delicias de los que buscan un juego arcade sin más pretensiones y con unas pruebas muy originales y divertidas que no encontraremos en otros exponentes del género.

Flatout 4: Total Insanity

7

Multijugador

6.7/10

Jugabilidad

7.1/10

Gráficos

7.0/10

Sonido

7.5/10

Diversión / Duración

6.9/10

Pros

• Multitud de pruebas muy divertidas.
• Diversión sin pretensiones.

Cons

• Puede resultar repetitivo.
• Las físicas de los vehículos podrían ser mejores.