Análisis | Chicken Assassin: Reloaded
18 julio 2018Mean McAllister vuelve a PlayStation 4 en Chicken Assassin: Reloaded, después de haber sido lanzado originalmente en PC en 2016. Nos encontramos en un juego en el que deberemos de hacer click de manera frenética, algo que puede parecer tosco y absurdo a primera vista, pero que acaba siendo adictivo a la larga y que nos hará dedicarle muchas horas para obtener todo lo que ofrece el juego.
La historia de Chicken Assassin: Reloaded, nos pone en la piel, o mejor en el plumaje de Mean McAllister, el pollo más duro de la ciudad, una encarnación viva de lo que saldría al combinar Rambo, Foghorn Leghorn, una botella de salsa picante y una caja de bebida energética.
McAllister se pondrá a repartir leña cuando Spritzel y su ejército de secuaces secuestran a su novia Candy, por lo que McAllister se embarca en un frenético viaje para salvarla, dejando un reguero de caos y destrucción a su paso.
Según avancemos en la historia iremos desbloqueando y mejorando a Mean McAllister con nuevos estilos de pelea y habilidades, permitiéndonos el acceso un arsenal con el cual exterminar a nuestros enemigos. También podremos mejorar nuestra indumentaria, la cual nos aumentará nuestros atributos y características.
Aunque a primera vista Chicken Assassin: Reloaded pueda parecer un juego de acción, este no lo es de forma convencional, ya que tiene pinceladas de Rol. Personalmente inicié el juego pensando que sería un beat’em up al uso, pero me equivoqué, aquí no controlamos a McAllister, sino que controlaremos un cursor con forma de mirilla con el stick analógico, cursor con el que deberemos apuntar a los enemigos y machacarlos pulsando X en nuestro DualShock.
Los elementos de RPG hacen su aparición cuando vemos que no podemos superar los niveles a la primera, ya que los enemigos nos vencen y nos vemos obligados a repetirlos en varias ocasiones para ir ganando experiencia y así poder acabar con los enemigos. La experiencia la obtiene conforme vayamos derrotando enemigos y obteniendo almas (una especie de orbes azules), con las cuales mejoraremos a nuestro personaje y obtener nuevas indumentarias.
Los niveles del juego siguen un mismo patrón, lanzándonos oleadas de enemigos, sobre 20 o 30 oleadas y con un pequeño jefe cada 10 y un auténtico jefe al final de la fase. Los enemigos además de las almas con las que ganaremos experiencia, también dejarán caer armas y equipamiento con las que equiparnos y mejoras nuestros atributos, cosa esencial para poder avanzar en el juego.
El punto adictivo del juego viene en el sistema de progresión y objetos, teniendo más de 450 que recolectar, lo que nos llevará muchas horas de juego, ya que deberemos de repetir muchas veces los niveles para poder conseguir las diferentes mejoras disponibles, además de muchas indumentarias para nuestro personaje.
Anteriormente hablábamos de las almas que recolectábamos al derrotar a los enemigos, las cuales usaremos para comprar las mejoras para McAllister. Además de derrotando enemigos, también obtendremos almas vendiendo artículos y golpeando el caldero del menú principal del juego, el cual nos proporcionará un sinfín de almas si tenemos la paciencia necesaria para vencerlo.
Chicken Assassin: Reloaded también tiene un sistema de logros, los cuales al conseguirlos nos darán más almas, así que paciencia, ya que algunos de los logros nos podrán dar incluso hasta un millón de almas.
Chicken Assassin: Reloaded como podéis apreciar en las imágenes que acompañan el análisis es un juego en 2D, con escenarios bien hechos y con sinfín de detalles y muchos gags escondidos. Cada escenario se diferencia bien del anterior y siendo estos muy variados.
Los enemigos también son bastante aleatorios y sin concordancia con la fase, ya que podemos estar luchando en una fase acuática y ser nuestros enemigos ratas.
La música acompaña perfectamente a la acción, aunque sobresale por encima de la música el ruido de los golpes.
Las escenas intermedias están recreadas con imágenes estáticas narradas por una voz y con subtítulos que en ocasiones hasta se salen de la pantalla.
Chicken Assassin: Reloaded es un juego de esos a los que jugar un día aburrido y sin nada que hacer. Pese a su adictivo sistema de progresión y un modo de juego sencillo, los 11 niveles que componen el juego pueden hacerse largos y tediosos.
Chicken Assassin: Reloaded
6,99€
Pros
- Adictivo sistema de progresión
- Control sencillo
- El sentido del humor
Cons
- Se hace repetitivo a la larga
- La música puede llegar a saturar
