Análisis | Days Gone

Análisis | Days Gone

25 abril 2019 0 Por Guillem Sanchis

Prepárate para una nueva aventura de supervivencia con gran carga narrativa, una jugabilidad con enormes posibilidades y un mundo abierto repleto de peligros con una ambientación postapocalíptica.

Ficha Técnica

  • Título: Days Gone
  • Desarrollador: Bend Studio
  • Distribución: Sony
  • Número de Jugadores: 1
  • Plataformas: PlayStation 4
  • PEGI: +18
  • Fecha de salida: 26 de abril de 2019
  • Género: Action, aventura, mundo abierto
  • Resérvalo ya por 64,90€

Llevamos ya casi 4 meses de 2019 y aunque hemos podido disfrutar en poco tiempo de una gran cantidad y calidad de lanzamientos, los jugadores de PlayStation 4 reciben este mes de abril, el primer gran exclusivo de la compañía nipona. Y es que Days Gone se ha convertido en uno de los proyectos más ambiciosos de Bend Studio, responsable de la mítica franquicia Syphon Filter o los spin-offs de Uncharted para PlayStation Vita.

Si bien es cierto que se trata del primer proyecto del estudio en las consolas de actual generación, el equipo de desarrollo tuvo claro desde el principio que su objetivo era construir un juego al que insuflarían toda su pasión y experiencia, con un mundo que interactuara directamente con el jugador, el resultado fue una apasionante aventura de acción en un mundo abierto en el que no sólo tendremos que enfrentarnos a innumerables hordas de zombis para sobrevivir, sino también a humanos que como nosotros luchan día a día por su vida.

Desde el principio de la aventura ya comenzamos a observar las influencias que han guiado a Bend Studio para desarrollar Days Gone. No sólo han utilizado la veteranía que han ido adquiriendo a lo largo de estos años en sus proyectos, sino que han reciclado mecánicas de juegos como The Last of Us, Horizon: Zero Dawn, Left 4 Dead, Dead Rising, Mad Max e incluso de films como 28 Días Después, de donde la compañía cogió inspiración para crear a los ya míticos zánganos (freakers).

Como consecuencia, tenemos ante nosotros un título enorme, con la premisa de ofrecer la mayor libertad posible al jugador, pero sin descuidar su jugabilidad, ofreciendo variedad, dinamismo y diversión, es decir, Days Gone intenta tender un puente entre jugabilidad y narrativa, ¿lo conseguirá?

Historia

La trama de Days Gone sucede a lo largo de Farewell, una zona situada al noroeste de Oregón, donde nos pondremos en la piel de Deacon St. John, personaje que destaca por incluir una fusión en su diseño que recuerda a otras grandes figuras de series como Sons of Anarchy o The Walking Dead, aunque su parecido no va más allá de lo estético, puesto que para la ocasión, Bend Studio ha querido que el jugador se sintiera verdaderamente como una parte fundamental de la historia. Con más de 6 horas de cinemáticas, el juego nos propone un viaje narrativo muy elaborado, profundizando en todo lo que rodea al personaje.

A modo de flashbacks, el jugador irá descubriendo de forma gradual partes de la vida anterior de Deacon, un motorista cazarrecompensas que lo ha perdido todo e intenta resistir en un mundo devastado por una peligrosa infección que ha transformado a la mayor parte de la población en unos seres llamados freakers (zánganos en español), una especie de zombis ágiles y muy veloces. No obstante, la ambientación que rodea el mundo es sin duda uno de los aspectos más llamativos y excepcionales de Days Gone, ya que nos sumerge de lleno en ese caos, declive y melancolía que nos propone el juego.

Pero la historia no gira únicamente entorno a Deacon, sino que se verá rodeado de diferentes personajes que a modo de secundarios influyen también en los acontecimientos que se irán sucediendo a lo largo del juego, cada uno con su propio trasfondo y personalidad, evitado siempre los estereotipos, un elemento crucial para ayudar al jugador a empatizar con cada uno de ellos.

Como veis, Bend Studio nos propone una historia plagada de tópicos: por un lado nos encontramos con un protagonista masculino, duro y valiente, pero que esconde un corazón benévolo, con compasión y empatía por el prójimo; por otro  tenemos un mundo post-apocalíptico destruido por una plaga donde los supervivientes intentan sobrevivir en medio de un conflicto entre organizaciones secretas y científicos que buscan la cura. Un guión que a simple vista puede parecer algo muy repetido en la industria, pero que consigue distanciarse de sus  congéneres gracias a la forma en la que expone su argumento.

Jugabilidad

Days Gone no es la típica aventura postapocaliptica, Bend Studio ha creado un mundo abierto que interactúa de lleno con el protagonista. Obviamente el juego sigue algunas premisas básicas del género, por lo que tendremos que completar misiones principales y secundarias, mientras nos aventuramos en busca de todo tipo de recursos y coleccionables. Sin embargo, las actividades secundarias no nos sacarán el contexto de la trama, sino que todo lo que hagamos fuera de la historia principal estará completamente relacionado. Por ejemplo, repartidas por el mapa existen zonas donde los zánganos construyen sus nidos y tendremos que destruirlos (utilizando fuego) para asegurar el sector, o bien los líderes de algunos campamentos humanos nos ofrecerán contratos de caza para eliminar a un asesino que haya causado algún tipo de daño a la comunidad. Tanto las misiones (principales y secundarias) como las diferentes actividades que nos encontraremos a lo largo del juego (incluyendo los constantes minieventos aleatorios repartidos por todo el mapa) al principio pueden parecer variadas pero conforme avanzamos se hacen bastante repetitivas.

Deacon ganará experiencia por completar misiones o eliminar enemigos, con cada nivel ganaremos puntos de habilidad, que podremos utilizar para mejorar al personaje tanto en el combate como en su pericia como superviviente. Para ello contaremos con un árbol de habilidades que nos permitirá ampliar las capacidades del personaje en el combate cuerpo a cuerpo, las armas a distancia y en la recolección de recursos para sobrevivir (comida, gasolina, munición, etc.) e incluso mejorar su moto, que no sólo nos permitirá desplazarnos rápidamente por el escenario, sino acceder a zonas del mapa que de otra forma serían inalcanzables. También tenemos la opción de mejorar la salud, resistencia y concentración del personaje mediante unas inyecciones que encontraremos repartidas por el mapa.

La moto es sin duda un elemento fundamental de la mecánica jugable de Days Gone, ya que cohesiona la exploración, la gestión de los recursos e impide que el jugador se evada del ritmo narrativo de la historia principal, ya que le permite desplazarse rápidamente por el mapa e ir completando todo tipo de misiones disponibles alrededor del mundo. Además, mientras estemos junto a ella podemos hacer un guardado rápido, una característica imprescindible debido a los constantes minieventos que nos encontraremos en nuestro camino e incluso nos permite prevenir muertes no deseadas.

Para el jugador, la moto debe ser su bien más valioso, un componente totalmente fundamental que debemos proteger a toda costa. El mapeado es enorme, por lo que ir a pie no es una opción, obviamente para arrancar el vehículo necesitaremos gasolina, un bien muy preciado que podemos encontrar frecuentemente en muchos asentamientos y zonas abandonadas, sin embargo, debemos estar pendientes del nivel reflejado en el deposito para no quedarnos sin combustible en el momento más inoportuno. Además, la moto también se puede dañar por caídas o golpes (incluso podemos atropellar enemigos), sin embargo, Deacon será capaz de repararla mediante piezas de chatarra que podrá recolectar abriendo capos de otros vehículos. Y no sólo podremos repararla, sino que en los diferentes campamentos de humanos, tenemos la opción de mejorar algunas de sus prestaciones a través del mecánico del lugar, desde la suspensión, neumáticos, potencia del motor, nitroso, e incluso modificar su diseño con pintura o pegatinas.

Aunque la moto será una parte primordial en nuestro día a día, Deacon también tendrá que ir a pie para explorar algunas zonas. No obstante, debemos tener en cuenta que ya vayamos en moto o a pie, ningún lugar es completamente seguro. A través de los bosques podemos encontrar una trampa hecha con un cable tensado que puede hacer que nos caigamos y de repente encontrarnos rodeados de carroñeros. Un grupo de humanos hostiles pueden estar ocultos en lo alto de un montículo y empujar un coche en llamas para cortarnos el paso en la carretera y hacer que nos caigamos en la moto para apresarnos y robarnos nuestras pertenencias… Es el mundo contra ti.

Incluso la naturaleza intentará acabar con nosotros, no sólo a través de los enjambres de freakers o los newts (una especie de niños zánganos que sólo nos atacan si nos adentramos en su territorio), sino lobos, osos, cuervos o pumas. Y aunque los humanos puedan parecer la amenaza más peligrosa del juego, ya os avanzamos que no será así, existe toda una serie de mutaciones muy peligrosas y es que los zánganos también evolucionan, sin embargo, será algo que tendréis que descubrir por vosotros mismos.

Uno de los detalles que nos ha llamado la atención ha sido que la inteligencia artificial de los enemigos es bastante deficiente, incluso en el nivel de dificultad más elevado. Es excesivamente fácil acabar con los enemigos (ya sea zángano o humano) en sigilo sin que te detecten. Además los tiroteos no suponen ningún tipo de desafío, ya que la puntería de los rivales es bastante imperfecta y puedes acabar con ellos perfectamente sin recibir ni un solo tiro. Sin embargo, cuando nos vemos rodeados de enemigos la dificultad se dispara de una forma exponencial. Si los zánganos atacan de forma simultánea, de 4 golpes pueden acabar fácilmente con nuestra vida, por lo que es totalmente recomendable eliminarlos sigilosamente y si te detectan, tener la moto a mano para huir rápidamente o bien esconderte hasta que dejen de buscarte.

A pesar de que nos sentiremos como nómadas sin casa, Deacon puede descansar en ciertos lugares que actúan como una especie de asentamiento para nuestro personaje. Por ejemplo, a lo largo del territorio encontraremos una serie de centros de NERO que una vez desbloqueemos y limpiemos de zánganos actuarán como base de operaciones, donde dispondremos de una cama para dormir, acceder a su arsenal de armas para cambiar su equipo, guardar munición o incluso guardar partida. Pero no será el único, ya que también encontraremos campamentos humanos donde el personaje podrá no sólo descansar, sino también hablar con NPC para avanzar en misiones de la historia principal, realizar tareas secundarias, comprar recursos, armas, modificarlas, mejorar la moto e incluso intercambiar objetos valiosos con los mercaderes, así como entregarles plantas o pieles de animales que vamos recolectando y cazando en nuestros viajes. Completar misiones, actividades y entregarles componentes aumentarán el medido de confianza de cada campamento, cuanto más alto, más fácil (y más barato) será conseguir nuevo equipamiento y desbloquear nuevas opciones de personalización de armas o de la moto.

A través del PAD táctil del Dualshock 4 accederemos a una especie de menú rápido donde podremos consultar el mapa, habilidades, inspeccionar los coleccionables o información sobre las diferentes misiones activas y pendientes) con sólo desplazar el dedo hacia la opción indicada. Un menú bastante intuitivo, accesible y sencillo con el que en cualquier momento podemos conocer todos los detalles necesarios para saber qué rumbo debemos tomar.

Por otro lado, con R1 accederemos a la típica rueda de comandos donde podemos no sólo equiparnos armas (ya sea de fuego, cuerpo a cuerpo, etc.), objetos arrojadizos, curarnos, o utilizar trampas para pillar desprevenido a los enemigos, sino que además podemos crear y modificar muchos de estos elementos. Por ejemplo, podemos crear cócteles molotov, dinamita, botiquines, flechas para la ballesta, etc. e incluso mejorar diferentes armas, como añadir pinchos a un bate de béisbol para que haga más daño o equipar un silenciador a una pistola para que nos ayude a matar con sigilo, etc.

No obstante, para crear y transformar nuestros pertrechos antes deberemos reunir los componentes necesarios. Tenemos dos opciones, o bien comprar recursos a los mercaderas con el dinero que podemos ganar cumpliendo misiones, tareas secundarias o incluso robando a otros muertos, o bien revisar cada rincón del bosque, asentamientos, cabañas abandonadas, o cualquier zona que nos encontremos en nuestro camino para reunir componentes y piezas que nos ayuden a crear todos estos elementos, por ejemplo, con vendas elaboraremos botiquines, con trapos y botellas de cerveza podemos crear cócteles molotov y con la madera de los arbustos que recolectemos construiremos nuestras propias flechas para la ballesta.

Obviamente sólo podemos llevar un número limitado de objetos, que podremos ampliar según vayamos mejorando nuestro nivel. Por otro lado, algunas armas se deterioran con el uso, como los silenciadores o bates, palos, hachas, machetes, etc. Con cada golpe que asestemos a los enemigos irá reduciendo su durabilidad que veremos reflejada a través de un porcentaje ubicado justo al lado del icono del arma que estemos utilizando, cuando llegue a cero se romperá y nos quedaremos sin ella.

No obstante, Deacon podrá reparar con piezas de chatarra (que también encontraremos a lo largo del escenario) las armas que se estropeen para devolverlas a su estado natural. Cabe destacar que no todas tienen la misma durabilidad ni hacen el mismo daño, un detalle que el propio juego nos compara al intentar coger las armas cuerpo a cuerpo, ya que únicamente podemos llevar una.

Por lo que se refiere a las armas de fuego, Days Gone nos ofrece un amplio abanico de posibilidades, ya que cuenta con una enorme variedad, desde pistolas, escopetas, subfusiles, hasta fusiles francotirador o ballestas. Las armas de fuego no se rompen, pero se nos puede agotar la munición, y como ya os hemos comentado anteriormente, debemos vigilar nuestras reservas para no quedarnos sin balas en medio de una horda de zánganos.

Lo que sí se estropea son las mejoras que les acoplemos, como por ejemplo, los silenciadores. Una barra nos indicará en todo momento su límite y tenemos dos opciones, o comprar uno nuevo a los mercaderes o buscar uno por nuestra cuenta. Otro detalle a tener en cuenta es que Deacon al principio únicamente puede llevar un arma principal y una secundaria, además las armas que cojamos de los cadáveres enemigos no serán “nuestras” y no dispondremos de ellas en nuestro arsenal, aquí sólo contaremos con aquellas que adquiramos a través de los mercaderas. No obstante, podemos intercambiar las armas que vayamos encontrando por el juego, un aspecto bastante recomendable ya que elegir el arma indicada para cada situación nos sacará de más de un apuro

Las sensaciones de disparo con las armas de fuego son bastante realistas, además el estudio ha cuidado los diferentes modelos para recrear tanto la cadencia como el retroceso de cada tipo. En los tiroteos podemos cubrirnos para evitar el fuego enemigo y elegir el momento justo para salir y apuntar a los enemigos valiéndonos del uso de la concentración de combate, una habilidad muy útil que fragmenta el tiempo (muy similar a Max Payne) y que nos permitirá acabar con ellos con disparos a la cabeza.

Como ya hemos avanzado anteriormente, Deacon tendrá que enfrentarse a diferentes enemigos: por un lado los zánganos y por otro humanos que como él, intentan sobrevivir en un mundo cruel donde no hay cabida para los débiles. El mundo que nos rodea es dinámico, cuenta con un ciclo de día / noche y además, todos los personajes hostiles viven a su manera, realizando tareas cotidianas como comer o dormir. Un detalle que será bastante relevante a la hora de avanzar por el escenario, ya que por ejemplo, los zánganos son más débiles por el día y más fuertes y numerosos por la noche.

Days Gone nos permite utilizar a los zánganos como un arma para derrotar a otros humanos hostiles, ya que tenemos la posibilidad de reunir una manada y hacer que nos sigan para llevarlos de cabeza a los campamentos. Todo dependerá de cómo decidamos llevar a cabo las diferentes misiones y tareas secundarias, ya que el usuario será el que elija el camino que quiere seguir. Por último también cabe destacar que la meteorología cambia en tiempo real, lo que tendrá un gran impacto sobre la vida de los personajes, al igual que el ciclo día / noche.

Resumiendo, Days Gone es un juego divertido, muy inmersivo que aprovecha mecánicas ya vistas en otros títulos similares y aunque no propone nada nuevo, Bend Studio ha conseguido construir un producto ameno, completo y extenso con más de 30 horas de campaña principal.

Gráficos y Sonido

A nivel gráfico, Days Gone no sólo sorprende por su increíble ambientación, sino por ser un juego cargado de paisajes naturales con una riqueza fascinante. Todo gracias a una dirección artística excepcional, acompañada por una iluminación muy correcta que nos deja grandes instantáneas. Los diseños y animaciones del protagonista y los enemigos también lucen con un gran acabado, así como los diferentes NPC (el juego incluye más de 30), lo que denota la enorme labor que ha hecho el equipo Bend Studio.

La transición del ciclo día/noche en tiempo real es sublime y su importancia en el juego es bastante considerable, ya que el mundo cambia totalmente cuando se hace de noche. Otro detalle muy cuidado en el juego son los efectos meteorológicos aleatorios que se van sucediendo a lo largo del tiempo, con espectaculares y sonoras tormentas, lluvia, nieve, etc., destacando por encima de todo las gotas de lluvia o el movimiento de la vegetación en los peligrosos temporales. Pero la cosa no queda aquí, ya que Bend Studio ha logrado recrear una versión alternativa de la región de Oregón de una forma absolutamente fantástica, introduciendo increíbles bosques, cascadas, cuevas, asentamientos de humanos, oscuros túneles y mucho más.

Y es que el mapa del juego es inmenso, con escenarios repletos de detalles muy cuidados, parajes naturales preciosos y coloridos, zonas interiores variadas y bien estructuradas. Durante la aventura puedes disfrutar de impresionantes amaneceres, puestas de sol o caminar por un bosque de noche iluminado por la luz de luna mientras intentas escapar sigilosamente de las grandes hordas de zánganos que te acechan en la oscuridad.

No obstante, técnicamente el juego no es perfecto e incluye pequeños bugs y problemas con la carga de texturas en algunas zonas. Otro aspecto que empaña el resultado global son las constantes pantallas de carga que aparecen entre misiones principales (o cinemáticas) en un juego en el que sólo la campaña principal puede superar las 30 horas, lo que entorpece el ritmo de la narración y se convierte en un aspecto bastante molesto para el usuario. En cuanto al rendimiento, la versión estándar de PS4 nos ofrece unos 30fps estables, mientras que la potencia de PS4 Pro permite al juego alcanzar los 60 frames por segundo.

La banda sonora del juego ha sido compuesta por Nathan Whitehead (The Purge o Transformers: Dark of the Moon), e incluye piezas musicales extraordinarias, que se adaptan tanto a los momentos más dramáticos o de acción, como a los serenos paseos por los bosques. Además también contiene ciertos efectos sonoros que nos sumergen de lleno en cualquier rincón del escenario, trasladándonos de lleno a esa tensión en situaciones de oscuridad y peligro, como momentos más alegres y divertidos. Y es que el ruido (tanto del personaje como de los enemigos) se convierte en una parte fundamental del juego. Por último, y como viene siendo habitual en los exclusivos de Sony, el doblaje ya sea en inglés o en castellano es absolutamente fantástico.

Conclusión

Days Gone no consigue destacar en ninguno de sus apartados, recicla conceptos y mecánicas vistas en otros grandes del género y no aporta nada nuevo, no obstante, logra fusionar todos sus elementos de una forma magistral para hacer vivir al jugador una aventura intensa y fascinante. Bend Studio ha creado un juego muy entretenido y visual, con una carga narrativa llena de tópicos pero que te mantiene en vilo hasta descubrir toda la historia que rodea a su protagonista.

Más allá de sus espectaculares gráficos, su exquisita banda sonora o sus enormes posibilidades en lo jugable con esa mezcla de personalización/progresión, acción, supervivencia y aventura, lo mejor de Days Gone reside sin duda en su espontaneidad, y es que cada misión, cada paseo en moto o cada instante que moremos por el enorme mundo abierto que nos rodea, puede derivar en toda una serie de actos impredecibles que guardan más de una sorpresa para el jugador.

En definitiva, el catálogo de PlayStation 4 incrementa su cantidad y calidad de exclusivos con un título completo, sólido, divertido e increíblemente variado tanto en forma como en contenido. Adéntrate por las devastadas tierras de Oregón y prepárate para una lucha intensa y sin descanso, es el mundo contra ti.

Days Gone

64,90 €
8.6

Historia

8.6/10

Jugabilidad

8.0/10

Gráficos

9.0/10

Sonido

8.7/10

Diversión/Duración

8.8/10

Pros

  • Su ambientación y un enorme mundo abierto lleno de posibilidades
  • Todo lo que rodea la mecánica de la moto
  • La progresión del personaje y las opciones de crafteo

Cons

  • Una historia excesivamente larga que se va diluyendo
  • Algunas misiones se vuelven repetitivas
  • La IA de los enemigos
  • Problemas técnicos (pantallas de carga) y bugs que se resolverán con futuros parches