Análisis | Draugen

Análisis | Draugen

26 febrero 2020 0 Por Alejandro Altaber

Debuta en consolas Draugen, una inquietante y prometedora aventura nórdica que sigue el estidlo ‘walking simulator’ y que destaca por la peculiar relación entre el protagonista y su ayudante,a demás de su increíble aspecto artístico.

Ficha Técnica

  • Título: Draugen
  • Desarrollador: Red Thread Games
  • Distribuidor: Red Thread Games
  • Número de Jugadores: 1
  • Plataformas: PlayStation 4, Xbox One y PC
  • PEGI: +16
  • Fecha de salida: 21 de febrero de 2020
  • Idioma: Voces en inglés y textos en español
  • Género: Aventura, Exploración

 

Ya está a la venta en consolas ‘Draugen’, el nuevo proyecto de Red Thread Games, estudio creador de Dreamfall Chapters, junto al equipo creativo detrás de The Longest Journey y The Secret World. Publicado en PC el mayo de 2019 y cosechando unas críticas notables, la compañía fincada en Oslo ha querido situar la nueva aventura en su país natal, pero llevando su ambientación justamente a hace un siglo.

Si bien su concepción arrancó allá por 2013, el desarrollo se ha ido gestando lentamente hasta dar forma al misterioso y hermoso viaje en primera persona por las tierras de Graavik.

Draugen nos lleva hasta la Noruega de 1921 para ponernos en la piel de Edward Charles Harden, un norteamericano que ha viajado a Noruega en busca de su hermana desaparecida. No obstante, Edward no hará este viaje solo, puesto que Lissie, que está bajo su custodia, lo acompañará en todo momento. Lissie es una joven muy afable, independiente y enigmática que te ayudará a explorar este hermoso pueblo costero, el cual se encuentra entre los fiordos y montañas de la Noruega rural.

El objetivo: encontrar a la hermana de Edward y desentrañar los oscuros secretos que se ocultan bajo tan pintoresco entorno. Dividida en seis episodios, superar la historia principal no nos llevará más de cuatro horas de partida. Quizás incluso un poco menos si no nos paramos en exceso a investigar todos los rincones de los lugares por los que avancemos, pues Draugen es sin lugar a dudas un título que rara vez se sale de la linealidad yendo directamente al grano.

A diferencia de Dreamfall Chapters, que basaba su experiencia en una aventura gráfica y resolución de puzzles, Draugen funciona de forma completamente distinta. El título que hoy analizamos encaja más en el género de ‘walking simulator’, explicando una historia de manera lineal mediante la exploración y recolección de los principales retales de la narrativa por los escenarios. Quizás, si hubiera que buscar una comparación directa, The Vanishing of Ethan Carter, Gone Home y What Remains of Edith Finch serían unas propuestas bastante similares.

Teniendo en cuenta sus referencias e inspiraciones en sus pilares narrativos y jugables, Draugen es un título que llega unos cuantos años tarde al aportar muy pocos incentivos e innovaciones salvo los continuos diálogos con nuestra acompañante. Lissie aporta naturalidad y frescura al transcurso de una historia de suspense y misterio que gana fuerza con interesantes e inesperados giros de guión y la introducción de ciertos elementos sobrenaturales.

Un detalle fantástico que permite deleitarse con su faceta artística en la completa ausencia de interfaz en pantalla, sin ningún tipo de información o inventario salvo la interacción con los objetos. Como pieza clave tenemos un diario que sirve como mapa para guiarnos por el lugar y también como recordatorio de los sucesos vividos. Por otro lado, pese a la exploración en el hallazgo de pistas y cartas se echa bastante en falta la resolución de ciertos puzles para hacer más amena y variada la aventura.

Aunque quizás no ha tenido demasiada repercusión a nivel internacional, el título de Red Thread Games ha cosechado interesantes éxitos en Noruega recibiendo los premios a “Juego del Año” y “Mejor Audio” en los Norwegian Spillprisen 2019, firmando a su vez un acuerdo de desarrollo con Goldfinch Entertainment en Reino Unido para una adaptación de Draugen para TV o cine. Un estudio que fue creado en 2012 con el objetivo de contar bonitas historia y que en pocos años ya ha conseguido obtener grandes recompensas más allá de sus videojuegos.

Desde su presentación ya se le veía algo especial a Draugen, y se trata de su fascinante apartado artístico a la hora de recrear los maravillosos paisajes y espacios abiertos de las tierras nórdicas que cambian según el clima y el estado mental de Edward. Lo mismo ocurre con la animación de los personajes, recreados mediante la captura de movimiento y destacando por una exquisita naturalidad en sus acciones.

Como ocurre en otras obras de similares estudios y niveles de presupuesto, al fijarte en el aspecto ‘micro’ es cuando aparecen los problemas ya que los modelados, sombreados y texturas son bastante mejorables y eclipsan el resto del conjunto.

En cuanto a su banda sonora, Draugen posee una hermosa variedad de melodías creadas por el galardonado compositor Simon Poole, conocido por su excelente trabajo en The Secret World, The Park o Dreamfall Chapters. Asimismo, todos los diálogos cuentan con doblaje en inglés y una excelente traducción de los textos al español para no perdernos ningún detalle relevante de la historia.

Viaja hasta una pintoresca comunidad costera anidada entre los fiordos y las montañas de la Noruega rural para desenterrar la oscuridad que se encuentra debajo de la pintoresca superficie. Draugen ya está a la venta en PS4 y Xbox One y es una experiencia muy recomendable para los amantes de las aventuras tranquilas, el género ‘walking simulator’ y una interesante historia que descubrir y disfrutar durante una apacible tarde.

 

Draugen

19,99€
7.7

Historia

8.0/10

Jugabilidad

7.0/10

Gráficos

8.0/10

Sonido

8.5/10

Diversión / Duración

7.0/10

Pros

  • La relación y evolución del personaje de Lissie
  • Interesante narrativa con buenos giros en el guión
  • Gran banda sonora e impecable recreación de los escenarios
  • La ausencia de interfaz de pantalla, todo un acierto

Cons

  • A nivel técnico deja que desear en modelados y texturas
  • Corta duración y nula rejugabilidad
  • La introducción de varios rompecabezas hubiera sido fantástica