Análisis | Final Fantasy XVI

Análisis | Final Fantasy XVI

21 junio 2023 1 Por Víctor González Valle

El Final Fantasy más épico. El Final Fantasy que necesitábamos.

Ficha Técnica

Título: Final Fantasy XVI

Desarrollador: Square Enix

Distribuidor: Plaion

Número de Jugadores: 1

Plataformas: Playstation 5

Género: RPG

2020, un año que fue duro para todos, la pandemia afectó a cada persona de una manera, pero desde luego fue un año para el olvido. Después de meses encerrados, de temor y de una nueva vida a la que debíamos adaptarnos (casi hablando en pasado ya, por suerte), los jugadores, la gente, buscaba bálsamos en cualquier producción interesante que se anunciase.

La industria de los videojuegos se vio seriamente ralentizada también, pero en ese año también había hueco para la esperanza, esperanza de una nueva generación de consolas, encabezada por Playstation 5 y Xbox Series S y X y para nosotros, los jugadores, estos cambios son un momento de ilusión, nuevas consolas, nuevos juegos y nuevas posibilidades para nuestras franquicias favoritas.

En el mismo año  en que  pudimos disfrutar del espectacular Remake de Final Fantasy VII, justo en el mes de septiembre, y después de muchos rumores , se anunció Final Fantasy XVI, la nueva entrega numerada de la franquicia de Square Enix.

Mucha es la ilusión que está recibiendo este título. Pero parémonos a preguntar el por qué. Final Fantasy XVI cuenta de base con un equipo de estrellas en su desarrollo.

El equipo denominado Creative Business Unit III es conocido esencialmente por Final Fantasy XIV, título que resucitó de la muerte de la mano de Naoki Yoshida, que ejerce de productor de esta décimo sexta entrega, y quien haya jugado al MMO de Square sabrá el cariño con el que se trata a esta entrega a todos los niveles, desde su infinito lore a su banda sonora, compuesta por Masayoshi Soken, que también se encarga de la música de este nuevo juego.

Hiroshi Minagawa se encarga de todo el apartado artístico ( por eso si las caras de los personajes os recuerdan levemente a Final Fantasy XII, todo tiene sentido, también trabajó en dicha entrega), mientras que el sistema de combate, más centrado en la acción que nunca, corre a cargo de Ryota Suzuki, que vino directamente de Capcom después de trabajar en títulos referentes como Dragon’s Dogma o Devil May Cry V.

No podemos mencionar a todos, pero si hay que hablar de su director. Y es que Final Fantasy XVI, pese a que aún haya gente que no lo sepa, no está dirigido por Yoshi-P, sino por Hiroshi Takai, que pese a ser un nombre menos conocido, lleva trabajando en Square Enix desde los tiempos de Final Fantasy V, estando más vinculado a “Romancing Saga” y a su debut en la dirección con The Last Remnant.

El juego busca, aunque no lo pueda parecer, volver a sus raíces, ya que Final Fantasy en sus inicios centraba sus mundos en la fantasía medieval con inspiraciones occidentales, cosa que XVI recoge totalmente con todos los elementos que hacen a Final Fantasy lo que es como franquicia: una historia interesante, personajes carismáticos y elementos narrativos como la lucha entre facciones, un imperio o la importancia de los cristales y en esta entrega, las invocaciones, que reciben el nombre de Eikons.

La historia de Final Fantasy XVI nos pone en la piel de Clive Rosfield en varias etapas de su vida, pero vamos simplemente a comentar la parte del prólogo que muchos habréis podido ver en trailers o la demo disponible para evitar en la mayoría de lo posible realizar Spoilers. Clive es hermano y a la vez guardián de Joshua, el elegido para heredar el Eikon del fuego, Fénix, ambos viven en el Gran Archiducado de Rosaría hasta que ciertos eventos dramáticos (muy dramáticos, de hecho) harán que Clive dedique el resto de su vida en busca de la venganza.

Y es que XVI apuesta por un mundo extremadamente rico en su construcción. Cada región cuenta con su propia historia así como su modo de tratar con los dominantes y portadores, y estos tendrán relaciones tanto amistosas como bélicas respecto a las otras naciones, ya sea por el control de los Cristales Madre, por territorio o por puras traiciones.

El propio equipo creativo ha confesado que una de sus inspiraciones ha sido Juego de Tronos y pese a que la historia continúa manteniendo todo lo que hace interesante a un Final Fantasy si encontramos esa narración más oscura de la serie de HBO donde no se cortarán un pelo en mostrarnos violencia bastante explícita, encuentros sexuales y lenguaje malsonante.

Permitidme un inciso en este análisis sobre el debate que hay en redes sociales estos últimos días y del que me gustaría expresar mi humilde opinión. Mucha gente defiende que Final Fantasy ya contaba con historias adultas y que XVI no es el primero en hacerlo, como algunos pueden abanderar. Esta afirmación me parece correcta, pero habiendo jugado al juego, me gustaría matizar ciertos aspectos para aclarar mi posición.

Cuando Yoshida y su equipo habla de que es uno de los Final Fantasy más adultos de la franquicia, no creo que sea tanto por el mensaje de su historia, que lo es pero que también podríamos referirnos a otros títulos de la franquicia con mensajes muy potentes, y tampoco es necesariamente la violencia explicita o el +18 en el PEGI, sino a la forma de contar esta historia, a la forma de mostrarnos este mundo de fantasía oscura donde se trata de forma muy dura el tema de la esclavitud, las relaciones entre clases sociales, el estigma de nacer de una manera concreta o el ser distinto a los demás.

Creo personalmente que ningún Final Fantasy ha tratado estos temas de manera tan directa y clara, por supuesto que son temas que han rondado a la saga desde sus inicios, pero es ese paso adelante en la forma de hacernos ver problemas sociales que podemos trasladar al mundo real, con toda la dureza que ello conlleva, lo que hace a XVI un FF sino “adulto”, más “oscuro” de lo que estamos acostumbrados, cosa, que dejo claro ya, no hace que los anteriores sean peores o pierdan legitimidad en ningún caso.

Dicho esto y sin querer hablar mucho más de la historia , acabar comentando que la dirección de escenas es espectacular, los diálogos están muy bien escritos y habrá personajes que adoraremos u odiaremos por lo bien pensados que están. Y pese a que el juego cuenta con varias opciones para empaparnos en su lore (en todo momento al pausar, podremos revisar descripciones de los personajes que aparecen en cada escena, el lugar y los eventos que están contando), la historia es bastante más fácil de seguir de lo que muchos puedan creer, ya que el núcleo es Clive y los personajes que lo rodean y lo demás va girando alrededor de él hasta colisionar de una manera u otra en su historia de una manera muy sólida y orgánica.

Pasemos a la jugabilidad. Final Fantasy XVI es un juego de acción totalmente, no es el primero como se ha dicho, pero es el que más apuesta por ello. En todo momento, tanto en la exploración como en los combates controlaremos a Clive, mientras que en determinados momentos de la aventura nos acompañarán distintos personajes controlados totalmente por la IA. Al que sí podremos dar órdenes es a Torgal, fiel lobo de Clive, que le acompañará la mayor parte del juego y que recibirá órdenes básicas por nuestra parte mediante una pulsación de la cruceta como que muerda, se abalance o que nos realice pequeñas curas.

El sistema de combate puede recordar a un hack and slash, pero no llega a la profundidad de estos. Con Clive podremos hacer ataques básicos con cuadrado, saltar con la equis y lanzar magias con triángulo, que podrán ser básicas y de disparo constante o más poderosas si lo dejamos un rato. En esta ocasión la magia no consumirá PM, por lo que solo tendremos que estar pendientes de nuestra vitalidad. Además, tendremos un botón de esquiva que deberemos dominar si no queremos recibir golpes del enemigo constantemente,  que requerirá cierto timing por nuestra parte, pero que es un elemento muy divertido a la vez.

Podremos realizar pequeños combos y aprender nuevas habilidades (escogiendo a mano nosotros o que el juego consiga o mejore las más óptimas a su antojo, acción que se puede deshacer en cualquier momento) mediante los puntos pertinentes. Como en todo buen RPG que se precie tendremos subida de nivel,  compra y mejora de equipamiento y el uso de objetos curativos, que tendrán un acceso directo en la cruceta ya que usaremos pociones más veces de las que creemos, estando las mismas  limitadas para que no podamos abusar de ellas, creando situaciones más tensas e interesantes.

El equipo de Takai sabe lo que se les da bien, y el juego está repleto de jefes, algunos más importantes que otros. Estos jefes, que os aseguramos que son docenas y docenas, contarán con su propia barra de vida al lado de la nuestra. Tendremos que aprender sus patrones mientras vamos reduciendo su barra de ímpetu, cuando esta llegue a la mitad el jefe quedará aturdido unos segundos y cuando la vaciemos por completo el enemigo quedará vulnerable unos segundos vitales. En este momento recibirá más daño de lo normal y  es cuando deberemos realizar la mayor cantidad de daño posible.

Para ello contaremos con habilidades de Eikon que realizarán diferentes efectos y harán mucho más daño que los ataques básicos, y que deberemos controlar su uso ya que cada uno de ellos tiene un tiempo de carga distinto.

Estos combates también tienen momentos más cinemáticos, para cambiar de fase, resolverlos o para ver movimientos y momentos que se trasladen de manera más complicada a la jugabilidad. Para ello se opta por unos sencillos QTE que pueden ser para esquivar, atacar o aporrear un botón. Quick Time Events que son más transicionales que otra cosa, porque son muy sencillos y nos dan tiempo de sobra para completarlos.

Conforme avance la aventura Clive irá consiguiendo nuevos poderes de Eikon, que podremos equipar a nuestra voluntad y nos permitirá cambiar entre tres de ellos siempre que queramos , representando diferentes estilos de combate y afinidades elementales, por lo que podremos construir a nuestro personaje como nos venga en gusto o mejor se adapte a nuestra forma de jugar.

Para los menos dados al rol de acción tan frenético como el que ofrece esta entrega, Takai y su gente tiene todo pensado. Además de dos modos de dificultad ,uno centrado en la acción y otro en la historia, en ambos modos disponemos de varios accesorios, totalmente opcionales, que nos harán la vida más fácil. Desde realizar combos sin tener que combinar botones, que Torgal actúe automáticamente sin necesidad de que le demos órdenes o utilizar pociones automáticamente, por lo que si no se os da bien el género, podéis adaptar la experiencia a vuestra manera sin problema alguno.

Para cerrar el  tema del combate no podemos dejarnos los enfrentamientos entre Eikons. Es preferible no mencionar demasiado porque estos son momentos únicos que tienen que ver con la historia, pero llegados a ciertos puntos tendremos enfrentamientos contra enemigos gigantescos mientras controlamos a Ifrit. Estos combates son de todo tipo, desde algunos que recuerdan a los combates normales pero a lo grande hasta otros con mecánicas de Shooter e incluso Wrestling, y os podemos asegurar que cada uno de estos combates nos van a levantar de la silla por lo épico de cada enfrentamiento, un extremo pocas veces visto en la saga.

Tenemos que hablar también de lo que hay a parte de los combates, y es que el título, pese a no contar con un mundo abierto si que es muy explorable. Además de tener una guarida a la que volver para mejorar nuestro equipamiento o aceptar misiones secundarias, tendremos varios modos más “arcade” donde repetir secciones enteras o incluso hacer esto mismo con puntuación , donde conseguiremos más contra mejor juguemos y esto se podrá subir a unos “Leaderboards” para competir contra gente de todo el mundo.

Viajaremos por el mundo de Valisthea a través de un mapamundi que irá añadiendo más iconos conforme avancemos en la historia. Los diferentes emplazamientos tendrán más o menos extensión, desde mazmorras bastante lineales a entornos mucho más abiertos y de un tamaño considerable que podremos explorar de cabo a rabo para buscar cofres, visitar diferentes pueblos o realizar las ya mencionadas misiones secundarias o cacerías.

Las misiones secundarias, pese a que en su desarrollo son las típicas de derrotar a X enemigo o entregar Y objeto si que nos recompensan con unas pequeñas historias muy interesantes, que nos ayudan a  entender mejor el mundo del juego y su población, no son esenciales para entender la historia del juego aunque  recomiendo que les deis una oportunidad ya que no suelen hacerse pesadas ni largas y algunas tratan temas bastante interesantes e incluso duros.

Pese a todas las bondades de dichas misiones, el ritmo y la cantidad en las que van saliendo, al alza conforme avanzamos en la trama principal puede hacer que se nos acumulen demasiadas, llegando quizá a agobiar un poco, ya que querremos hacerlas todas, pero a la vez nos cortará el ritmo de la campaña.

Una vez tratada la jugabilidad vamos con los aspectos técnicos. Final Fantasy XVI utiliza , según sus desarrolladores, un motor nuevo y propio para la creación del juego, y creednos, es un juego que intenta darlo todo constantemente.

Contamos con dos modos gráficos, uno que funciona a 30 fps estables a 4k de resolución y otro que busca los 60 fps a 2k. En el momento en que escribo estas líneas el modo rendimiento es bastante variable, los frames cambian constantemente y si bien nunca llega a “petar” , ese baile constante, en especial en los entornos más grandes, puede resultar algo molesto, pese a que cabe comentar que Yoshida ha confirmado una actualización antes de que se lance el juego para mejorar estos aspectos y mejoras varias, por lo que puede que esto mejore para cuando leáis este texto. Servidor ha preferido jugar a 30fps, ya que es un juego que pese a basarse en la acción se puede jugar perfectamente a esta velocidad de refresco y no hemos notado bajadas o tirones en ningún momento reseñable.

A nivel artístico se apuesta por una paleta de colores apagada generalmente para representar un mundo oscuro y turbio. Visitaremos parajes de todo tipo: grutas, bosques o grandes praderas donde la iluminación estará escogida al dedillo para brindarnos estampas preciosas a cada momento. Estos momentos  podremos capturarlos gracias a su sencillo modo foto, de hecho, las capturas que acompañan a este análisis fueron realizadas por servidor con dicho modo.

El diseño de personajes también es soberbio, siendo cada personaje principal único y en el caso de los dominantes, todos tendrán rasgos del Eikon al que representan, siendo ya la cúspide del diseño dichas invocaciones gigantes, desde Ifrit a Garuda, pasando por todas las demás que veremos a lo largo de nuestra aventura. Por supuesto, el diseño artístico también cuestión de gustos, no todo el mundo es tan fan de la estética medieval ( de hecho, es mi caso), pero se nota tanto el mimo en cada detalle del juego que es capaz de compensar incluso a los que no nos sentimos prendados con estas estéticas.

Si ya nos habían dejado prendados los apartados anteriores, agarraos que vienen curvas, el apartado sonoro, y en especial el musical, es lo mejor de todo Final Fantasy XVI. Por una parte contamos con voces en varios idiomas entre los que se encuentran : inglés, japonés, alemán, francés, italiano y español de Latinoamérica. Es una pena que no haya llegado doblado a español de España, pero parece que es un paso de la franquicia por abarcar más idiomas. Las voces en inglés, con las que he jugado, vienen al dedo de cada personaje, y creedme, os vais a enamorar de la voz de Cid, recordad lo que os digo.

Es en la música donde el juego explota. Los que venimos de jugar Final Fantasy XIV sabemos que Soken es un mago con la partitura, pero el trabajo que realiza en XVI supera todas las expectativas posibles. Es cierto que quizá no es el Final Fantasy más variado en cuanto a temática, pero la magia que realiza Soken utilizando leitmotivs constantemente hace que cuando suena uno de los temas épicos ya sea en las batallas de Eikons o en momentos dramáticos, logre sacarnos lágrimas casi más por las notas musicales que por lo que ocurre en pantalla, siendo la  simbiosis entre imagen y sonido  algo  difícil de expresar con palabras.  Lo que tengo claro es que Masayoshi Soken tiene un futuro brillante por delante y llegará a estar en el mismo olimpo en el que ahora colocamos a personalidades como Nobuo Uematsu o Yoko Shimomura, si es que no lo ha conseguido ya.

Conclusión

Final Fantasy XVI es un juego excelente. Es un nuevo paradigma en el RPG japonés y una reinvención del Action RPG. Estoy seguro que será el ejemplo a seguir por otras muchas propuestas en el futuro.

No es un juego perfecto, pero desde el primer momento sabe lo que quiere y nos lo da. La fCreative Business Unit III ha creado un título cargado de mimo y detalle, lleno de referencias a la saga, respetuoso con su legado y que como siempre ha hecho Final Fantasy en sus entregas principales, busca un nuevo enfoque y estar a la vanguardia.

Como no me gusta compararlo con otras entregas de la franquicia, ya que cada una es de su padre y de su madre, y también hay aspectos como la nostalgia o la situación vital de cada uno, que hace que queramos más o menos unas entregas u otras de la saga solo os diré que esta décimo sexta entrega se gana con creces el número que lleva, y que vais a disfrutar de este título hasta el último segundo y estoy seguro que será de esos juegos que dejan un vacío una vez terminado. Por suerte, Final Fantasy está viviendo una nueva época dorada y nos quedan muchísimos títulos por disfrutar, mientras tanto veniros conmigo a Valisthea, no os vais a arrepentir.

Final Fantasy XVI

79,99€
9.5

Historia

9.5/10

Jugabilidad

9.3/10

Graficos

9.4/10

Sonido

10.0/10

Duración / Diversión

9.4/10

Pros

  • El sistema de combate es super divertido.
  • Banda sonora impecable.
  • Las batallas de Eikons.

Cons

  • El framerate baila demasiado en algunos escenarios.
  • Los QTE son demasiado sencillos de completar.
  • Poco que hacer en el mundo abierto.