Análisis | Kingdom Hearts III

La esperada aventura de Sora y compañía por fin esta entre nosotros.

Que podemos decir de Kingdom Hearts que tú, ávido lector, no conozcas. Si estas leyendo este análisis probablemente conozcas la franquicia, puede que no al dedillo o puede que te criases con ella (como servidor), pero en cualquier caso es una saga que no ha pasado desapercibida para nadie. Por fin, después de numerosas entregas no numeradas , que no por ello de peor calidad o menos importantes, tenemos en nuestras manos Kingdom Hearts III, el final de la saga «Dark Seeker», y creednos, la espera ha valido la pena, estamos ante un titulo atemporal como ya lo fueron la primera y segunda entrega.

Lo hemos repasado en varios artículos en Región Playstation, pero para sintetizar, Kingdom Hearts fue un juego lanzado para Playstation 2 en el año 2002 fruto de la colaboración entre Square Enix y Disney y que buscaba mezclar el rol tan característico de la compañía japonesa con las licencias de Disney, mezclado con algunos personajes de Final Fantasy. El resultado fue una franquicia que perdura 17 años después y que sigue más viva que nunca.

Además de las dos entregas principales hemos tenido numerosas entregas adyacentes, para consolas portátiles, móviles y remasterizadas en consolas actuales, estas entregas han abarcado desde precuelas a historias de personajes importantes, todo para desembocar en el juego que hoy tratamos. Por ello cada uno de estos juegos tiene su relevancia a la hora de entender el contexto de toda la franquicia, y pese a que Square Enix se ha empeñado en crear unos resúmenes con los puntos más importantes para entender esta última entrega, el que haya disfrutado de todos o casi todos estos juegos, ya fuese en su día o gracias a las remasterizaciones, podrá disfrutar de este universo en todo su esplendor.

No vamos a desvelar excesivos detalles de la historia para no destruir vuestra experiencia, como decíamos, Kingdom Hearts III es la entrega final de la saga «Dark Seeker» que empezó con la primera entrega y ha abarcado todos los títulos hasta el momento, por lo que nos encontramos ante un punto de inflexión.

El juego comenzará justo donde lo dejó tanto Kingdom Hearts: Dream Drop Distance como Kingdom Hearts 0.2: Birth By Sleep – A Fragmentary Passage. Sora, que no ha podido superar el examen a maestro de la llave espada y por tanto conseguir el poder de despertar a otros corazones, se embarca buscando respuestas e intentando volver a recuperar los poderes que Xehanort le arrebató al poseerlo en la entrega anterior.

Mientras, Riku y Mickey investigarán en diversos mundos la posibilidad de traer de vuelta a tres portadores de la llave espada que cayeron en el pasado y que todos los que hayáis jugado Birth By Sleep conocereis. A partir de aquí comienza una historia donde se interconectarán elementos de toda la franquicia , en un guión lleno de intrigas, giros , sorpresas y mensajes bastante profundos, algo a lo que nos tiene ya acostumbrados Tetsuya Nomura, mente pensante detrás del proyecto.

En este título se nota la experiencia del creativo con la franquicia, la historia resulta mucho más interesante y amena de entender, y está muchísimo mejor entretejida entre las historias de los diferentes mundos que visitemos, por lo que siempre estará ocurriendo algo de especial relevancia para la historia y acontecimientos posteriores, todo ello con unos diálogos muy bien construidos donde veremos de primera mano la evolución que todos los personajes han tenido a lo largo de todas las entregas de la franquicia.

Kingdom Hearts III coge lo mejor de sus entregas principales y lo va sazonando con retazos de las jugabilidades más experimentales de sus Spin off, todo ello crea una combinación super divertida y muy pulida, donde cada jugador podrá encontrar su estilo.

Controlaremos a Sora que hará uso de diferentes llaves espada para combatir a sus enemigos realizando potentes y ágiles combos y aprendiendo nuevas habilidades conforme sube de nivel así como todo tipo de magias. Una de las novedades que encontramos en este título es la posibilidad de transformar nuestras llaves espada en diferentes armas, cada una con sus ataques y usos propios.

Por ejemplo tendremos una que se convertirá en un gigante martillo lo que nos permitirá dar potentes golpes para luego transformarse en un taladro y ganar agilidad así como la posibilidad de atacar desde debajo del suelo. Otra se transformará en dos especie de pistolas y nos permitirá atacar a distancia y a varios enemigos a la vez, para finalmente convertirse en un cañón que propicie potentes disparos mágicos . Comentamos estas dos armas porque son las que más se han mostrado en los trailers, pero hay muchas más, algunas que son claros guiños a juegos anteriores y otras completamente novedosas, cada una con su jugabilidad y estilo propio. Además, en esta ocasión podremos equiparnos tres de estas a la vez, pudiendo cambiar entre ellas con la simple pulsación de un botón , lo que ofrece mucha más variedad y agilidad a los combates.

Las magias también ganan en complejidad y utilidad, ya que al igual que los ataques físicos, cuando lanzamos varias magias seguidas veremos unas flechas encima del menú de comandos, cuando estas flechas se llenen accederemos a un ataque más poderoso que tendremos unos segundos para realizar, por lo que la estrategia aumenta sobre cuando utilizar cada ataque o cuando reservarnos el poderoso que nos desbloqueé.

Como siempre , nos acompañarán en nuestras aventuras Donald y Goofy, que tendrán una IA más efectiva que nunca que podremos además configurar como queramos, se acabó excusarnos en que Donald no nos cura, ya que podremos darle la orden incluso de que exclusivamente nos cure solo a nosotros. Además, otra novedad es que todos los integrantes de cada mundo participarán en la batalla. En anteriores entregas, teníamos que cambiar nuestro grupo para añadir a las estrellas invitadas del mundo que visitábamos, en esta ocasión llegaremos a encontrar combates con incluso cinco integrantes lo que no hace si no aumentar más si cabe la espectacularidad de estos.

Tendremos muchísima variedad de ataques combinados con todos los miembros del grupo, tanto para finalizar combos como ataques especiales, que contarán con animaciones muy espectaculares y causarán estragos entre los enemigos. Mención a parte para dos elementos, uno nuevo y otro que vuelve, que pese a que no se aprovechan tanto como se podría siguen siendo muy divertidos. Tenemos por un lado los vínculos, que son las «invocaciones» de esta entrega, podremos invocar a Rompe Ralph o a Ariel entre otros, y lo bueno de esto es que cada uno será controlable el tiempo que duré la invocación y tendrá sus mecánicas propias. Por ejemplo, Rompe Ralph colocará bloques sobre el escenario y los destruirá con un poderoso impacto mientras que Ariel hará uso del agua como elemento principal.

El otro punto y que si es novedad en esta entrega son las atracciones. Basadas en las atracciones reales de Disneyland, dependiendo nuestra forma de luchar y el entorno en el que nos encontremos podremos invocar un gigantesco barco pirata, unas tazas giratorias o un tiovivo entre otras, cada uno otra vez con sus propias mecánicas y su forma de realizar daños así como con sus animaciones particulares, todo un deleite para la vista.

La única pega que podemos poner a toda la jugabilidad es la dificultad del título en si, en su historia principal, ni siquiera en modo experto resulta excesivamente difícil. Si bien hay algunos combates y jefes finales más desafiantes y en modo experto deberemos andar atentos a nuestra vitalidad porque un encadenamiento de ataques puede llevarnos al Game Over, el juego resulta bastante sencillo comparado con otras entregas como Birth By Sleep o la primera entrega por poner un ejemplo. Eso no quita que haya desafíos importantes y que podamos sudar en algún que otro momento.

La exploración también gana enteros gracias a la verticalidad que ganan todos los mundos la posibilidad que tendremos de escalar los escenarios y la amplitud de estos es abrumadora. Cada mundo será único, no solo por su estética si no por su diseño y posibilidades. Además todos serán gigantescos, Nomura no mentía cuando dijo que cada mundo del juego era exponencialmente más grande que cualquiera de juegos anteriores. Si queremos explorar el 100% de cada entorno podemos pasarnos horas explorando, ya sea buscando tesoros o portafortunas, el coleccionable de esta entrega.

Tendremos multitud de situaciones y minijuegos en cada uno de los mundos, desde controlar espectaculares robots de juguete en el mundo de Toy Story, deslizarnos con el escudo de Goofy por los entornos nevados de Frozen o realizar fotos que nos encargarán los mogurí en su orfebrería para desbloquear la creación de nuevos objetos. Estos son unos pocos pero habrá muchísimos mas.

Rediseñada totalmente se encuentra también la nave gumi. En este caso para viajar entre mundo y mundo contaremos con un mundo «semiabierto» por el que podremos desplazarnos con total libertad en todas las direcciones. En estos viajes podremos enfrentarnos a enemigos e incluso jefes, pero también podremos descubrir constelaciones secretas, buscar materiales para mejorar nuestra nave en el extenso editor que tendremos así como misiones especiales que nos proporcionarán premios como bloques gumi o experiencia para subir el nivel de la misma. Las batallas con la nave recuerdan a las de Kingdom Hearts II, pero todo lo demás es completamente nuevo, y probablemente la mejor manera que se ha diseñado hasta el momento de viajar entre mundo y mundo de la franquicia.

Kingdom Hearts III hace uso del potente motor gráfico Unreal Engine 4, este motor permite una versatilidad impresionante para saber captar la esencia de cada uno de los mundos que visitaremos en nuestra aventura. Cada mundo Disney estará cuidado hasta detalles enfermizos, todo lo recordaremos como sus respectivas películas e incluso la paleta de colores seleccionada siempre será la adecuada para sumergirnos en el universo que nos ofrezcan. Os aseguramos que en lugares como el cuarto de Andy de Toy Story se nos caerán las lagrimas de estar visitando con total libertad un emplazamiento tan mítico creado con un mimo inusitado.

Los personajes no serán menos, Sora y compañía lucirán como nunca, multitud de animaciones nuevas, físicas para el pelo, sincronización labial o diferentes diseños para adaptarse a cada mundo, desde ser juguetes a monstruos pasando por los diferentes ropajes que luzca Sora dependiendo de la transformación de Llave Espada que este utilizando.

Disney no se ha llevado peor parte, además del detalle de los mundos, personajes como Woody y Buzz Lightyear o Rapunzel serán calcos a sus homónimos cinematográficos. Además, gracias a la gran dirección de escenas con la que cuenta el juego, veremos planos en los que a veces no podremos casi ni diferenciar cual es el juego y cual es la película si las ponemos lado a lado, algo completamente impresionante. Todo ello con dos modos gráficos, uno centrado en la fluidez y el otro en la resolución, con 30 fps bloqueados. El modo desbloqueado nos ofrecerá una media de 40-50 frames por segundo lo que propiciará una fluidez más que suficiente para disfrutar de la espectacularidad del juego sin ningún tipo de problemas. Quizás hemos notado algún que otro tirón en el modo desbloqueado cuando hay muchos elementos y partículas en pantalla, pero estos son momentáneos y no nos han afectado a la experiencia prácticamente en nada.

Pocos quedarán ya por conocer a Yoko Shimomura. Esta compositora japonesa ha participado en las anteriores entregas de la franquicia o en Final Fantasy XV, por nombrar uno de sus trabajos más recientes. No nos equivocaríamos si decimos que en esta entrega estamos ante uno de sus mejores trabajos. Las melodías de cada mundo son de una extrema belleza y saben emular a la perfección las películas a las que representa. Por otra parte, las melodías originales son de una calidad que roza la excelencia, y vamos a desear que lancen la banda sonora para adquirirla en cuanto escuchemos varios de los temas que nos tiene preparados la compositora en los momentos más álgidos de la aventura. Contaremos también con remezclas de temas míticos de toda la franquicia, lo que nos sacará seguramente una sonrisa al reconocerlas inmediatamente pero escucharlas con un toque nuevo.

Los efectos de sonido también cumplen a la perfección tanto en los sonidos de las diferentes armas, los efectos de las magias o las voces de los personajes , que solo se pueden seleccionar en inglés y que cuentan con las voces habituales de los personajes de la franquicia así como de la gran mayoría de las películas, por lo que estamos ante un doblaje de gran calidad. Todo ello por supuesto acompañado de textos completamente en castellano por lo que no tendremos problema alguno para poder seguir toda la historia.

Sin duda la espera para Kingdom Hearts III ha valido la pena. Estamos ante una de las mejores entradas de la franquicia y un paso adelante en todos los aspectos enorme. Desde la madurez de su narrativa respecto a entregas anteriores, el salto gráfico y jugable y la calidad de la banda sonora, estamos ante uno de los mejores juegos de rol de la generación sin duda alguna.

Queda para el usuario decidir si estamos ante la mejor entrega de la franquicia. No hemos notado prácticamente la presencia de relleno o estiramiento de la historia porque si, algo que hacia por ejemplo la segunda entrega con la segunda vuelta a los mundos. Desde luego, lo que tenemos claro es que Tetsuya Nomura y su equipo en Square Enix han creado un juego, que al igual que ahora pasa con su primera y segunda entrega, dentro de muchos años, continuaremos recordando y disfrutando de ella.

Kingdom Hearts III

9.1

Historia

8.4/10

Jugabilidad

9.3/10

Gráficos

9.5/10

Sonido

9.5/10

Diversión/Duración

9.0/10

Pros

• Banda sonora memorable.
• La recreación de los mundos.
• Variedad de situaciones.

Cons

• Puede tener poco contenido "endgame".
• Resulta relativamente fácil en cualquier dificultad.