Análisis | Outward

Análisis | Outward

9 abril 2019 0 Por Cristina Ferragut

Nos adentramos en el universo de Outward, un ambicioso e innovador RPG con toques de supervivencia desarrollado por el estudio independiente afincado en Canadá, Nine Dots Studios.

Ficha Técnica

  • Título:  Outward
  • Desarrollador: Nine Dots Studio
  • Producción: Deep Silver
  • Distribuidor: Koch Media
  • Número de Jugadores: 1-2
  • Plataformas: PlayStation 4, Xbox One y PC
  • PEGI: 12
  • Fecha de salida: 26 de marzo de 2019
  • Idioma: inglés, textos en castellano
  • Género: RPG
  • Resérvalo ya para PS4 por 34,90€: Outward

 

Analizamos uno de los juegos de rol más ambicioso e innovador del año, una propuesta centrada en la total libertad de exploración que cuenta además con un arco argumental bastante profundo, una mecánicas interesantes y la posibilidad de disfrutarse tanto en solitario como en compañía de un amigo mediante el modo multijugador o a pantalla partida. Si eres un amante incondicional de los RPG, Outward es una propuesta que no puedes pasar por alto.

Historia

La trama de Outward comienza con nuestro personaje moribundo a orillas de la costa, tras sufrir el naufragio del navío en el que viajábamos. Los jugadores nos pondremos en la piel de un personaje al que podremos personalizar a través de un  editor básico  desde la raza, el color de su pelo o distintos peinados.

Nuestro protagonista lejos de ser un héroe o un elegido divino, como nos tienen acostumbrados en otros juegos del mismo género, será un pobre hombre o mujer que arrastrará una deuda de sangre para con su pueblo. Una antigua costumbre en la que cualquier mala acción de tus antepasados se convierte en una carga generación tras generación.

Cuando llegamos a la aldea, la muchedumbre nos amenaza y reclama el pago de esa deuda, pero toda la fortuna que conseguimos en tierras lejanas acabó en el fondo marino cuando regresábamos a nuestro hogar. Sin medios con los que finiquitar la deuda, la líder nos dará cinco días para reunir el dinero suficiente o de lo contrario nos quitarán nuestra vivienda.  A partir de aquí tendremos que conseguir el dinero o no, y seguir nuestra aventura libremente pudiendo escoger entre tres facciones (caminos) distintas.

Jugabilidad

La historia de Outward la escribe el jugador. Desde el momento en que tengamos el control de nuestro personaje, cada decisión que tomemos tendrá consecuencias durante nuestro viaje. Y no solo me refiero a las opciones de diálogo que de algún modo condimentarán la narrativa, si no que afectará a nuestra capacidad para viajar por el mundo o a la hora de sobrevivir a las peleas y aprender nuevas habilidades. Pero esto no es todo. La propuesta de Nine Dots viene aderezada con un ligero toque de supervivencia que de algún modo reaviva la receta clásica de los rpg.

Los jugadores tendremos que tener en cuenta algunos estados físicos básicos de nuestro personaje, el hambre y la sed serán los más comunes, pero también habrá que vigilar algunas enfermedades comunes como el resfriado. Mantener nuestra mochila con suministros de alimentos y agua será de vital importancia para este fin.

También será necesario una olla para cocinar la carne o el pescado si no queremos que se pudra. Si comemos comida en mal estado enfermaremos. Conseguir alimento o por lo menos reunir el suficiente como para saciar el hambre es difícil, a menudo necesitaremos cazar, con todos los peligros que conlleva, sobre todo al principio cuando vamos equipados con unos simples harapos. Conseguir dinero para hacerse con un buen equipo tampoco es nada fácil  —no hace falta decir que no conseguí el dinero necesario para pagar mi deuda al principio del juego, así que el ejército se quedó con mi casa, complicándome más si cabe, mis andanzas—.

Mis comienzos no fueron los mejores, todo hay que decirlo. Perdí mi casa y con ella una cama donde recuperarme, una cocina donde preparar recetas antes de partir, además de un maravilloso baúl donde guardar todo aquello que no necesitamos. Y para colmo, para recuperarla los soldados me pidieron el doble de mi deuda inicial. Mis primeras horas de juego fueron un no parar de morir. Quise recuperar el dinero luchando contra las hienas y vendiendo su piel, pero el sistema de comercio es muy duro, apenas nos recompensarán por los materiales que vendamos. Así que finalmente hablé con varios NPC hasta que uno de ellos me encomendó mi primera misión, ir en busca de un escudo perdido supuestamente en el interior de unas cuevas al lado de Quersoneso. Creyendo que la mujer me recompensaría gratamente y  recordando sus palabras —al noroeste de la aldea— traté de encontrar esas cuevas, pero lo bueno e interesante de Outward es que a pesar de contar con un mapa, éste no nos indicará los lugares exactos de las misiones, tan solo algunas localizaciones claves, como nuestro pueblo, asentamientos de bandidos o accesos a otros mapas.

Acostumbrarse a ubicar y recorrer el amplio universo de Outward es difícil, pero también muy gratificante aunque muchos jugadores pueda resultarles frustrante . Puedes pasarte horas, literalmente, vagando en círculos tratando de encontrar una ubicación. Lo mismo sucede con los interiores. No hay ningún mapa que nos indique nuestra posición y generalmente los sistemas de cuevas y mazmorras son bastante intrincados con enemigos acechando a la vuelta de la esquina que no dudarán en matarte de dos golpes.

Tan solo tendremos una ranura de guardado y el juego guarda de forma automática muy a menudo así que aunque trates de quitar el juego justo antes de morir cuando inicies estarás muerto. Con suerte puede que te recoja un compañero y te lleve hasta la aldea más cercana, puede que algún viajero te encuentre moribundo y despiertes en una hoguera con algunos suministros para que puedas seguir con tu viaje, que  te recoja algún bandido y te lleve a su campamento o en el peor de los casos, seas llevado hasta una prisión totalmente desprovisto de equipo y obligado a trabajar para ganarte el favor de los guardias para que te dejen salir. También puedes hacerles frente pero no te lo recomiendo.

Sin duda estas mecánicas, tanto la supervivencia como el factor sorpresa a la hora de revivir en un lugar aleatorio tras morir, son los puntos fuertes del juego. Outward es una propuesta de rol muy completa en que la que constantemente tendrás que buscar el mejor camino que garantice tu supervivencia, y aún así, todo puede salir mal.  Como os contaba unas líneas más arriba tendremos que tener en cuenta varias estadísticas para controlar la salud de nuestro personaje, la sed, el hambre, el cansancio o las enfermedades. Sin embargo tratar de recuperar salud es todo un arte, me ha costado algo de tiempo averiguar cómo hacerlo.  Así como en otros juegos basta con vendar las heridas o simplemente comer, en Outward comer tan solo nos proporcionará una ligera recuperación de salud por segundo. Otra opción es crear pociones, pero para ello necesitaremos recetas y materiales para elaborarlas además de un kit de alquimia. Otra de las opciones para recuperar la salud es dormir, ya sea en posadas, en tu casa (podremos comprar una en cualquiera de las ciudades) o a la intemperie. Sin embargo si descansamos en el exterior corremos el riesgo de despertar en mitad de la noche por culpa de una emboscada.

También hay que tener en cuenta los ciclos climáticos, llevar más agua durante los meses estivales así como pociones que nos ayuden a combatir el calor o el frío de los meses invernales. Otro punto que me ha gustado mucho, es que a pesar de no contar con habilidades mágicas al principio del juego, podremos imbuir las armas cuerpo a cuerpo—al más puro estilo souls— con distintos elementos.  Realmente se nota mucho la diferencia al enfrentarte a los enemigos con armas elementales a no hacerlo.

¿Dónde guardamos todos esos suministros y artilugios?, en una mochila. Te recomiendo que en cuanto puedas adquieras una mochila con suficientes espacios para poder llevar el máximo de objetos y peso ya que cuando sales a explorar es fácil encontrarse con cofres que contienen armas y armaduras que podrás vender en cualquier mercader, por unas pocas monedas, eso sí. Al igual que en otros juegos como Skyrim, The Long Dark o The Witcher 3, el peso de nuestro equipo se verá reflejado en nuestra resistencia. Cuanto más peso más consumo de energía tendremos y más lentos iremos. En Outward por suerte, si nos encontramos en esta situación mientras estamos en combate, podremos lanzarla al suelo con tan solo pulsar un botón, pero si caes en combate tendrás que recuperarla de nuevo, como si de almas en Dark Souls se tratase.

En cuanto al sistema de combate, podremos usar un amplio abanico de armas, incluidas alabardas a dos manos, espadas y puñales o incluso podremos equiparnos un escudo para bloquear ataques basados en la resistencia o arcos para atacar a los enemigos a distancia. También podremos ejecutar varios tipos de golpes (potentes, ligeros) con tan solo pulsar un botón. La IA de los enemigos es bastante predecible.

Otro punto a destacar del juego es que puede disfrutarse en compañía de otro jugador ya sea a través del modo multijugador o a pantalla partida.

Gráficos y Sonido

Puede que Outward no destaque por su apartado gráfico de inicios de la pasada generación de consolas, aún así, si no se lo tienes en cuenta, hay cierta belleza arquitectónica y natural en su su universo, pero también hay muchos otros elementos como castillos o campamentos de bandidos que siguen siendo parcos en detalles. Por otro lado los enemigos son tan variados entre sí que parecen sacados de distintos juegos, no es algo negativo, pero es cierto que no hay mucha concordancia entre ellos. Podemos encontrar esqueletos, hienas, una especie de ave mitad chocobo mitad cocatriz, o incluso bandidos. Hasta aquí bien, pero es que además veremos criaturas elementales fantásticas, mangostas eléctricas y hongos explosivos.

La banda sonora a cargo de Jean-François Racine merece mención aparte. Y es que sus composiciones de carácter oriental repletas de matices, son una delicia para los oídos y al igual que los sonidos ambientales, nos ayudarán a sumergirnos de lleno en el mundo de Aurai. Temas variados, emotivos durante las noches apacibles, épicos durante los combates y misteriosos en los intrincados recorridos a través de mazmorras y cuevas. Sin duda alguna la banda sonora que conforma Outward es digna de la gran pantalla.

Conclusión

La apariencia de Outward engaña. Tras esas texturas y modelados de la pasada generación de consolas se esconde una propuesta con un arco argumental profundo y unas mecánicas interesantes inspiradas en otros títulos, para crear una experiencia de juego totalmente única. No es un juego perfecto, tiene algunas faltas a nivel gráfico y técnico. En espacios abiertos los escenarios se sienten vacíos, apenas hay enemigos, elementos visuales y detalles. Pero la originalidad de sus mundos, la grata experiencia de juego o la espectacular banda sonora compensa con creces todas las carencias derivadas de un presupuesto limitado.

 

 

 

 

 

Outward

34.90
7.7

Historia

8.5/10

Jugabilidad

8.0/10

Gráficos

5.5/10

Sonido

8.5/10

Diversión

8.0/10

Pros

  • Innovador y ambicioso.
  • Excelentes mecánicas de supervivencia
  • Espectacular banda sonora
  • Variedad de mundos y la total libertad para explorarlos

Cons

  • Carencias técnicas y gráficas como escenarios vacíos, texturas y modelados de la pasada generación o cortes visuales entre los mundos virtuales