Análisis | Prince of Persia: The Lost Crown

Análisis | Prince of Persia: The Lost Crown

23 enero 2024 0 Por Alejandro Altaber

Prince of Persia vuelve por todo lo alto con una nueva entrega original que sorprende convirtiéndose en uno de los mejores metroidvania que hayamos probado hasta la fecha. Acción, plataformeo y exploración que rozan la perfección.

Ficha Técnica

  • Título: Prince of Persia: The Lost Crown
  • Desarrollador: Ubisoft Montpellier
  • Editora: Ubisoft
  • Número de Jugadores: 1
  • Plataformas: PS5, PS4, Xbox Series, Xbox One, Switch y PC
  • PEGI: +12
  • Fecha de salida: 18 de enero de 2024
  • Idioma: Voces y textos en español
  • Género: Acción, Aventura, Metroidvania

 

Hemos tenido que esperar prácticamente 14 años para disfrutar de una nueva entrega de una de las franquicias más queridas de Ubisoft. Pese a los continuos reclamos por parte de los fans, la compañía francesa centró sus esfuerzos en series de a priori mayor calibre como Assassin’s Creed, Far Cry o Tom Clancy’s. De hecho, pese a que el equipo de Ubisoft Montpellier firmó dos títulos casi sobresalientes en lo gráfico y jugable con Rayman Origins y Rayman Legends, no les permitieron continuar exprimiendo su talento para derivarlos a la saga Tom Clancy’s para crear Ghost Recon Wildlands y Ghost Recon Breakpoint.

Por suerte les han concedido regresar a la senda de la creatividad con Prince of Persia: The Lost Crown, obra que supone el estreno de la serie en el género metroidvania 2D. Mientras Ubisoft Montreal sigue trabajando en el remake de Prince of Persia: Las Arenas del Tiempo, esta entrega es la oportunidad perfecta para adentrarse en la franquicia antes del otro esperado lanzamiento. Acción, plataformeo, exploración y puzles al nivel de los mejores metroidvania de la última década que hacen de Prince of Persia: The Lost Crown el primer gran juego de 2024, y que seguro estará en todos los tops del año dentro de 12 meses.

La historia de la aventura se aleja de la temática habitual. En vez de ponernos en la piel del clásico príncipe aquí manejamos a Sargon, un poderoso y joven guerrero que forma parte de los legendarios Inmortales, un selecto grupo que se encarga de proteger Persia de cualquier posible amenaza. Tras los acontecimientos iniciales, la trama nos llevará en un viaje para rescatar al Príncipe Ghassan, secuestrado y llevado al misterioso Monte Qaf, donde tendremos que manipular los límites del espacio y el tiempo para traer de vuelta al heredero al trono.

La premisa de Prince of Persia: The Lost Crown es interesante, pero ni el guión ni los diálogos acaban estando a la altura del esto de elementos jugables. Tanto la historia como los personajes protagonistas quedan desaprovechados, pero sí hay que reconocer mérito al extraordinario trabajo en la creación de los mitos y leyendas que rodean la ambientación del universo del juego.

Si nos centramos en finalizar únicamente la historia principal, Prince of Persia: The Lost Crown se completa en unas 15-20 horas, sin embargo todo amante del metroidvania siempre busca encontrar hasta el último secreto y recoveco del mapeado. Igualmente, hay un buen puñado de misiones secundarias que nos obligan a explorar al máximo cada zona, múltiples objetos coleccionables que amplían el lore, jefes opciones y exigentes retos que solo los más habilidosos e inteligentes sabrán resolver. Si haces todo esto la duración se puede ir hasta más allá de las 30 horas y creernos que todas ellas son de máximo disfrute.

Pese a que tras el desarrollo había un grandioso equipo de creativos, ni mucho menos pensábamos que Prince of Persia: The Lost Crown podría llegar a ser uno de los mejores metroidvania que hemos jugado en nuestra vida. Ni mentimos, ni exageramos, y es que Ubisoft Montpellier planta cara a recientes titanes del género como Hollow Knight, la serie Ori, Metroid Dread, Blasphemous, Ender Lilies, etc. Eso solamente en términos de movilidad y construcción del mundo, pero es que va más allá con endiabladas secciones de plataformas, un exigente sistema de combate propio del souls-like y rompecabezas que recuerdan a la trilogía de Las Arenas del Tiempo, El Alma del Guerrero y Las Dos Coronas. Básicamente, en el aspecto jugable lo hace todo bien.

Entrando ya en mayor profundidad, Prince of Persia: The Lost Crown es un metroidvania 2,5D que combina con maestría acción, plataformeo y exploración. Sus creadores han logrado un equilibrio magistral y una curva de dificultad perfectamente medida en la continua obtención de nuevas habilidades y el componente backtracking para llegar a lugares y secretos previamente inaccesibles. La aventura de Sargon acierta en cada decisión y encadena multitud de sorpresas para mantener un ritmo que te tiene enganchado durante toda la partida.

Desde los primeros minutos sientes que estás ante un título diferente, con otra aura. El control del personaje es inmejorable, con animaciones y movimientos precisos que dan al jugador un sinfín de posibilidades para hacer frente tanto a los duros combates como al intransigente diseño de las plataformas.

Celeste y la saga Ori son sin lugar a dudas los referentes en el aspecto plataformero. En los compases iniciales se limita a hacerte clavar buenos saltos, pero posteriormente hay que encadenar el uso de habilidades y acrobacias de manera precisa si quieres llegar a sortear infinitas trampas o resolver sesudos puzles en el escenario. No hay que desesperarse si algo no sale al primer, segundo o tercer intento.

La selección de movimientos y habilidades es primordial para superar determinadas zonas que requieren de la máxima precisión, concentración y reflejos que incluso te pueden tener cerca de 1 minuto sin llegar a tocar el suelo. Mezclar doble salto, impulso aéreo, control del tiempo y otras ingeniosas técnicas son solo la punta del iceberg de todo lo que llega a ofrecer Prince of Persia: The Lost Crown. Por suerte el control es excepcional y los toques con los elementos y obstáculos del entorno nunca son injustos, siempre son fruto de una mala decisión por nuestra parte.

Crear un fluido sistema de movimientos y un amplio set de habilidades es primordial en un metroidvania, pero es imposible alcanzar la excelencia si no cuentas con un soberbio diseño de niveles y un gran mapa con secciones interconectadas. No mentíamos unos párrafos más arriba, Ubisoft Montpellier ha firmado un resultado sobresaliente en el diseño y estructura jugable Prince of Persia: The Lost Crown, y el mapeado no iba a ser menos.

Ya no solo por el tamaño del mapa, que es enorme, sino por su magnífica ejecución incluyendo numerosas alternativas en el camino para avanzar, infinidad de secretos, retos secundarios con jugosas recompensas, geniales conexiones entre los distintos biomas y sorprendentes atajos para moverte entre zonas de manera más natural.

El Monte Qaf puede llegar a abrumar en primera instancia, pero una vez obtienes las habilidades suficientes para alcanzar cualquier recoveco, deseas recorrerlo de principio a fin y hallar todos los misterios que esconde. Recordamos que Rayman Origins y Rayman Legends eran un derroche continuo de originalidad, y en Prince of Persia: The Lost Crown han vuelto a superarse con un diseño único, variado y extremadamente divertido en todas sus vertientes.

Ubisoft Montpellier propone dos modos distintos de recorrer el mundo, guiado y exploración. El primero dejará marcado en el mapa diferentes iconos para que recordemos zonas bloqueadas hasta la obtención de una habilidad, lugar donde se encuentra un NPC de una misión secundaria, próximo objetivo de la historia principal, etc.

El modo exploración, en cambio, elimina todo este tipo de ayudas y por ello vamos avanzando más a ciegas y cabe echar mano de un recurso que nos ha parecido sumamente destacable y que seguro será imitado en futuras propuestas del género. Se trata de los fragmentos de memoria, una especie de marcador que permite sacar fotos que quedan registradas en el mapa. Una manera muy útil de recordar posteriormente el lugar que estaba bloqueado o el tesoro que anteriormente era inalcanzable.

Al igual que el plataformeo, el sistema de combate también comienza tímido con un mero ataque con las espadas, el bloqueo y un movimiento de esquiva. Poco a poco se van sumando nuevas técnicas, combos, armas y ataques definitivos mediante el consumo de la barra de maná del protagonista. Asimismo, en el lugar que funciona a modo de nexo central del Monte Qaf tenemos disponibles tutoriales que arrojan luz al amplio set de golpes que es posible crear y combinar, enviando a los enemigos por los aires, avasallarlos en el cielo y finalmente estamparlos contra el suelo con movimientos espectaculares. Lo que en primera instancia parece sencillo esconde una profundidad tremenda.

Otro aspecto a destacar es el contraataque vengativo, una suerte de parry que activa una secuencia al bloquear en el momento concreto el ataque enemigo. Contra los monstruos normales es satisfactorio, pero ante los jefes finales la sensación es increíble. Y mención especial cabe hacer a estos enfrentamientos, que suponen intensas batallas de diversas fases, patrones de movimientos diferentes y un reto que nos pone al límite constantemente. Además, el número de jefes es asombroso, y uno tras otro se va superando en términos de diseño, puesta en escena y épica.

Como detalle, Prince of Persia: The Lost Crown es tan complicado como nosotros deseemos, pues incluye cuatro niveles de dificultad (novato, guerrero, héroe e inmortal) y diferentes configuraciones que permiten personalizarla según la experiencia que busquemos, cambiando el daño y la salud de los enemigos, daño del entorno, la ventana de tiempo de esquive y el índice de consumo de Athra. En nuestro caso hemos optado por la segunda opción más difícil y ya avisamos que cabe afrontar la aventura con mucho cuidado, incluso con situaciones a priori asequibles.

El acabado gráfico y la dirección artística son los aspectos más discretos de Prince of Persia: The Lost Crown. No son malos, pero técnicamente es un juego que no destaca en nada. Los modelados, texturas y nivel detallado  son bastantes flojos, y parece que Ubisoft Montpellier ha preferido priorizar el rendimiento para llegar a todas las consolas de forma fluida y ofrecer la mejor experiencia posible. Dado que eran conscientes de las limitaciones técnicas, han puesto también todos sus esfuerzos en plasmar un grandioso estilo en la dirección artística. La variedad y calidad de las animaciones son alucinantes, pero alcanza el máximo esplendor en las fascinantes cinemáticas que nos regalan los ataques especiales y los enfrentamientos más relevantes de la trama.

En términos de rendimiento funciona de forma fluida en todas las plataformas y versiones, pero sí es cierto que en PlayStation 5 logra alcanzar resolución de 4K y a 120 imágenes por segundo (en televisiones compatibles). Y al igual que las cosas positivas hay que comentar otras negativas, como son la presencia de algunos errores de programación que obligan a cargar el último punto de control.

La banda sonora ha caído en buenas manos con Gareth Coker, compositor de Immortals: Fenyx Rising y la saga Ori, que regala agradables melodías para la exploración y épicos temas en las batallas contras los jefes finales. Asimismo, como es habitual, Ubisoft cuida al máximo todos sus productos y ha doblado al español todos los diálogos, con la especial mención de Felipe Garrido poniendo su voz a Sargon.

Conclusión

Prince of Persia: The Lost Crown es uno de los mejores juegos de 2024’. A estas alturas de año esta frase puede sonar absurda, pero tal y como avancen los meses seguro que la escucharemos repetir puesto que el regreso de la serie ha sido un verdadero sorpresón. La acción, exploración y secciones de plataformeo rozan la excelencia, convirtiéndolo en uno de los mejores metroidvania de la época moderna.

Los creadores han conseguido una propuesta equilibrada, desafiantes, con un impecable diseño de niveles y un ritmo de progresión como muy pocos han logrado. La historia y narrativa cojea por momentos, y pese a que resuelve de forma correcta, hay vacíos que lastran el argumento. Lo mismo ocurre con el apartado técnico, con bugs que se deben solventar y un apartado gráfico que no es lo mejor que hemos visto de los desarrolladores franceses, no obstante, es un regreso espectacular para una saga que parecía olvidada

Posiblemente los fans más acérrimos de la franquicia estén deseando que vea la luz cuantes el remake de Prince of Persia: Las Arenas del Tiempo, pero este nuevo enfoque que le ha dado Ubisoft Montpellier llevándolo al terreno del metroidvania le ha sentado fenomenal, y encima han firmado un auténtico juegazo que será recordado durante años.

Prince of Persia: The Lost Crown

49,95
8.9

Historia

7.5/10

Jugabilidad

10.0/10

Gráficos

8.0/10

Sonido

9.0/10

Duración / Diversión

10.0/10

Pros

  • Equilibrio excelente entre acción, plataformeo y exploración
  • Magnífico diseño de niveles, gran ambientación y perfecta cohesión del mundo
  • Profundo sistema de combate con variados poderes y habilidades, con destacadas batallas ante jefes
  • Exigentes secciones de plataformas, inspirados puzles e infinidad de secretos a descubrir por todo el mapa
  • Contenido para abarcar entre 20-30 horas de partida con múltiples misiones secundarias.

Cons

  • Gráfica y técnicamente es bastante flojo
  • Bugs que se deben solventar con próximos parches
  • Pese a la premisa inicial, la historia pierde fuelle rápidamente