Análisis | RiME

Análisis | RiME

29 mayo 2017 0 Por Guillem Sanchis

Ha llegado la hora de analizar RiME, uno de los videojuegos independientes más esperados por nuestro equipo. Tequila Works tiene como objetivo conquistar a los jugadores a base de sentimientos y emociones con el apartado técnico como su principal valedor. Prometen despertar en nosotros todo tipo de sensaciones, alegría, tristeza, angustia y mucha ternura, todo ello sin hacer uso de la palabra, únicamente con imágenes y melodía. El trabajo bajo el que ha cimentado el estudio esta inigualable aventura es sin duda uno de sus alicientes más atractivos, ¡prepárate para sumergirte en un viaje lleno de color y ternura!

Ficha Técnica

  • Título: RiME
  • Desarrollador/Editor: Tequila Works
  • Distribuidor: BadLand Games
  • Número de Jugadores: 1
  • Plataformas: PlayStation 4, Xbox One y PC
  • PEGI: +7
  • Fecha de salida: 26 de mayo de 2017
  • Idioma: Textos en español
  • Género: Aventura y puzles
  • Cómpralo ya por 29,95€: RiME 

El equipo español, responsable de otros grandes títulos como Deadlight o The Sexy Brutale, está dejando huella en la industria con el desarrollo de juegos de una gran calidad con un presupuesto bastante inferior a las grandes producciones Triple-A de otras compañías, pero a las que nada tiene que envidiar. RiME es sin duda un ejemplo más de la sobresaliente trayectoria con la que nos está sorprendiendo Tequila Works, un juego genuino, que aunque combina algunas ideas utilizadas en otros títulos, mantiene su propia esencia con una maravillosa mezcla de aventura, plataformas y lo mejor de todo, una capacidad de transmitir absolutamente fantástica, de lo mejor actualmente en el mercado. Audiovisualmente es uno de los mejor títulos de lo que va de año, pero como viene siendo habitual, para alcanzar la perfección es necesario un justo equilibrio entre jugabilidad, historia y apartado técnico.

Tequila Works anunció RiME durante la Gamescom 2013 como título exclusivo de PlayStation 4, tan solo unos meses después de haber comenzado a trabajar en el proyecto, una decisión que los propios creadores han comentado recientemente que fue nefasta. Tras mucho tiempo asegurando una y otra vez que RiME seguía en desarrollo, en marzo de 2016 el estudio español sorprendía comunicando que había recuperado los derechos sobre la licencia, para más adelante confirmar que el título sería multiplataforma y no exclusivo de la consola de Sony como se preveía en sus inicios. Y no es el único cambio que ha experimentado el juego desde entonces, puesto que su faceta artística también ha variado. A pesar de todo, estos cambios y tiempo de espera extra han sido fundamentales para evolucionar y mejorar un juego que garantiza una experiencia extraordinaria.

Historia

El inicio del juego puede dejarnos bastante descolocados, si bien la cinemática con la que arranca la historia (breve pero concisa) evidencia que nuestro protagonista ha encallado en la playa de una isla tras una devastadora tormenta, el jugador comienza la trama del juego sin ningún detalle más. RiME nos lanza a la aventura sin ningún tipo de explicación, algo que quizá echemos en falta. Una pequeña introducción hubiera sido un aliciente fundamental para mantenernos enganchados desde el inicio, aunque más tarde y en forma de pequeños flashbacks, vamos descubriendo qué es lo que le ha pasado al protagonista, quién es y de donde viene.

RiME promete emocionarnos con una historia y protagonista excepcionales, sumergiendo al jugador en una aventura de plataformas llena de desafíos, giros y belleza sensacional. El equipo de Tequila Works ha cuidado con mimo cada detalle tanto a nivel argumental como de su protagonista principal, su objetivo completamente definido es transmitir al jugador esa sensación de inquietud, exaltación o alegría que experimenta el personaje durante la aventura. Y no es algo que únicamente delegue en él, sino que la preciosidad del entorno que nos rodea también ayuda para que el jugador se sienta cómodo explorando una serie de escenarios sublimes llenos de sentimiento.

A pesar de todo RiME tiene una historia sencilla pero bastante atractiva. El juego se centra en un joven que naufraga y queda atrapado en una misteriosa isla tras una tormenta devastadora. Aunque a simple vista el terreno salvaje y desconocido puede llegar a encandilarnos por la preciosidad de sus parajes, esconde oscuros secretos de un mundo en constante expansión a los que tendremos que hacer frente para mantenernos con vida y sobrevivir usando únicamente nuestro propio ingenio. Estaremos completamente solos y aislados, no tendremos contacto con nadie, más allá de los animales que habitan la isla. Pero no os preocupéis, puesto que no genera un vacío incómodo, ya que estamos antes un viaje lleno de descubrimientos.

Jugabilidad

Obviamente las comparaciones son inevitables, y RiME incluye mecánicas de grandes sagas como Zelda o los míticos títulos de Team ICO, no obstante, Tequila Works ha sabido implementar al juego su propia identidad, tanto en el diseño del juego, ambientación o jugabilidad, gracias sin duda al increíble talento del estudio español.

El primero de ellos y que más salta a la vista es la forma de contar la historia, al más puro estilo de The Last Guardian o Ico, RiME nos sumerge en una aventura de 8 a 10 horas de duración sin voces ni palabras. Aquí es donde reside la sutileza y el gran trabajo del equipo de desarrollo, que consigue transmitir la trama del juego y su trasfondo a través de los hechos que sucederán a lo largo del juego inspirado en las tierras de la costa del mar Mediterráneo. Los puzles, los objetos en el escenario y la propia naturaleza (como por ejemplo el viento o los animales) se encargarán de actuar como narrador y guiarnos a lo largo de nuestro viaje.

A fin de cuentas RiME es un juego de acción, aventuras y puzles como mecánicas más destacables, aunque sin duda es de este último del que más bebe. El protagonista se encuentra completamente indefenso sin ningún tipo de arma. Obviamente el jugador no se tendrá que enfrentar a ningún adversario como tal de forma directa, más allá de algunas zonas concretas en las que sí contaremos con la presencia de enemigos.

No obstante, el estudio ha introducido un sistema en el cuál el jugador tenga que enfrentarse a los enemigos de estos niveles sin necesidad de utilizar la fuerza, únicamente con su pericia o como no, haciendo uso de los puzles. Un ejemplo claro del método usado por Tequila Works lo encontramos en una zona donde nos persigue un pájaro enorme y tenemos que ir resguardándonos bajo techo en las formaciones rocosas o subterráneas que vamos encontrando a nuestro paso para seguir avanzando, en el caso de permanecer al raso más allá del límite, el pájaro acabará con nosotros. La forma de eliminarlo es muy sencilla, tenemos que ir visitando varios molinos para esparcir una especie de “humo” que guardan en su interior y lo que genera nubes de tormenta con sus respectivos rayos que caen sobre el pájaro y lo alejará de nosotros.

Otro ejemplo lo encontramos en una serie de espectros oscuros que nos absorben nuestra esencia (o el color del personaje) cuando pasamos cerca de ellos y pueden llegar a acabar con nosotros si se juntan muchos o no escapamos rápidamente. La manera de acabar con ellos reside en unas bolas de luz que nuestro personaje tendrá que activar para iluminar la zona y que desaparezcan, eso sí, los espectros vuelven a aparecer a los pocos segundos. El resto de niveles los completaremos únicamente avanzado y resolviendo puzles, eso sí, muy bien integrados con el entorno.

Los puzles son variados, originales pero pecan bastante de simplicidad, puesto que no representan ningún desafío real. Por un lado encontramos un rompecabezas en el que tenemos que dar gritos con el personaje o transportar unas bolas y colocarlas en sitios específicos para avanzar. También observamos otra ingeniosa mecánica mediante la cuál interactuámos con las sombras y la perspectiva del escenario para resolver el puzle o por ejemplo controlar una gigantesca bola que nos permite cambiar la hora del día, lo que acelera los ciclos de día y noche (duran aproximadamente 20 minutos reales), lo cuál nos será muy útil para avanzar por fases que únicamente podemos hacerlo durante un ciclo.

Tequila Works siempre ha destacado que RiME no es una aventura de mundo abierto, sino más bien una serie de niveles plataformas definidos donde el jugador irá viajando entre los distintos espacios conectados a través de puzles. No obstante incluye algunos elementos clave de este género como la de encontrar coleccionables o invitarnos a explorar el escenario que nos rodea para interactuar y seguir avanzando entre los rompecabezas. Obviamente esto significa que el camino está marcado, el propio juego tiene la función de guía y cuando el usuario se desorienta aparecerá un peculiar animal (concretamente un zorro) que nos indica la senda a seguir con sus chillidos. Como bien decimos no es un compañero inseparable sino que este zorro aparece en ocasiones puntuales cuando el jugador necesita alguna pista específica. Además también contaremos con la ayuda de una especie de robots centinela que nos ayudarán a avanzar por algunas zonas y resolver diferentes niveles.

Gráficos y Sonido

Audiovisualmente, RiME es sin duda una auténtica obra de arte. Muy cercano a las fantásticas obras de arte de Joaquín Sorolla, en las cuales se ha basado el estudio español para captar esos bellos escenarios del Mar Mediterráneo, con su luminosidad y un mar en movimiento digno de admirar tanto de noche como de día. No hablamos de unos gráficos sobrenaturales en cuanto a realismo como ocurre en los Triple-A, sino que RiME guarda su propia esencia, con un cuidado diseño y una selección de colores que no dejan nada al azar. Por ejemplo, el color blanco indica los lugares por los que podemos trepar, el dorado para los objetos con los que podemos interactuar o el rojo para el protagonista (concretamente su capa). Cada color tiene su objetivo y sin duda la compañía ha sabido jugar bien con ellos para representar sus intenciones en cada uno de los niveles. El resultado es un juego técnicamente de 10 y que sumerge al usuario en una experiencia que se disfruta más audiovisualmente que por su propia jugabilidad.

Como bien decimos el apartado gráfico RiME destaca por sí solo. El equipo de Tequila Works ha construido un vistoso y colorido mundo cuidando al máximo el detalle. Huelga destacar que los desarrolladores han creado todas las animaciones del juego a mano, no han utilizado el sistema de motion capture en ningún momento, por lo que todavía tiene más mérito que RiME sea capaz de transmitir ese realismo, tanto en sus escenarios, como los objetos que se incluyen en él, desde las nubes a los árboles, hojas, animales o el propio protagonista. Los movimientos del niño son brillantes, el trabajo es envidiable ya que están logradas todas las acciones, desde bucear hasta cómo se cuelga en los salientes, todo responde de una forma muy natural.

RiME te transmite una sensación muy emocionante, su efecto es el de estar sumergido en una película de animación. Ya sea de día o de noche, todo el escenario que compone la propia isla resulta absolutamente enternecedor, con una belleza insuperable. El diseño artístico roza lo irreal, y consiguen cautivar nuestro interés por continuar zambulléndonos en su propuesta creativa. Como contrapunto, debemos destacar que algunas zonas rompen este idilio artístico al encontrarse más vacías u oscuras. Además el juego sufre caídas y ralentizaciones, incluso en su versión para PlayStation 4 Pro.

Por último queremos hacer una mención especial para la cámara que nos acompaña durante la aventura, aunque es totalmente inteligente (adaptándose sola a la mejor perspectiva del protagonista mientras vamos desplazándonos por la isla), el jugador la puede controlar en todo momento, lo que permite tener una panorámica muy buena y a nivel jugable ofrece una visión genial en todo momento. Esto permite no perdernos ningún detalle de lo que nos rodea, algo genial para resolver los puzles, escalar obstáculos o admirar con detalle el hermoso paisaje que nos rodea, fundamental.

La banda sonora del compositor David García es absolutamente fantástica, acompaña la ambientación del juego y consigue transmitir una serie de sentimientos y emociones únicas. Se adapta perfectamente en todo momento a lo que está sucediendo en la aventura. Sus melodías van variando según los actos de nuestro protagonista y su estado de ánimo, por tanto dependiendo de si está feliz, triste, cansado o atemorizado, escucharemos una música completamente diferente a la anterior. Lo mismo ocurre en los ciclos de diurnos y nocturnos, donde existe un acorde concreto para cada uno, también cuando resolvamos un puzle o avancemos por el sitio correcto la melodía será más intensa, enfatizando nuestro éxito.

Conclusión

Tequila Works nos sorprendió en su momento con Deadlight o The Sexy Brutale y no esperábamos menos en esta ocasión. RiME es desde nuestra humilde opinión, la mejor obra del estudio hasta la fecha. La capacidad para emocionarnos y adentrarnos en una mágica aventura utilizando nuestra capacidad auditiva o visual está a la altura de muy pocas compañías. Pero sólo podrás admirar realmente su singularidad si consigues jugarlo por ti mismo. Su reducido precio (se puede conseguir por 29,90 euros en algunos comercios) es un aliciente más para disfrutar de esta corta pero intensa aventura.

En definitiva, RiME promete ofrecernos una aventura concisa pero muy intensa, capaz de contagiar al jugador con una sensibilidad y ternura como pocos títulos han sabido hacer. Un juego que se sale de lo convencional “made in Spain” y que mezcla una serie de géneros para conformar una aventura atípica, con un diseño visual y banda sonora capaz de contagiar emociones al jugador con un par de imágenes o notas musicales y por último, un viaje con mecánicas de rompecabezas perfectamente integrados que llevarán al jugador a vivir un viaje de reconocimiento y grandes revelaciones sobre uno mismo.

RiME

29,95 €
7.8

Duración

7.0/10

Jugabilidad

7.0/10

Gráficos

9.0/10

Sonido

9.0/10

Diversión

7.0/10

Pros

  • Una banda sonora excepcional
  • Un juego artísticamente impecable
  • Consigue transmitir gran variedad de emociones y sentimientos

Cons

  • Los puzles no suponen un gran desafío
  • Pequeños problemas de rendimiento en algunas zonas