Análisis | Sonic Frontiers

Análisis | Sonic Frontiers

23 noviembre 2022 0 Por Víctor González Valle

El erizo azul demuestra que pese a sus 31 años de vida es capaz de reinventarse.

Ficha Técnica

Título: Sonic Frontiers

Desarrollador/Editor: Sega/ Sonic Team

Distribuidor: PLAION

Número de Jugadores: 1

Plataformas: PlayStation 4,Playstation 5, Xbox One, Xbox Series X/S, Pc y Nintendo Switch

Género: Plataformas

Arduo ha sido el camino de Sonic desde su paso a las tres dimensiones en el ya lejano Sonic Adventure para Dreamcast. Muchos han sido los títulos que el Sonic Team nos ha traído de la mascota de Sega, muchos intentos de reinventarla o crear mecánicas originales, algunas con más éxito y otras con menos.

También hemos vuelto a ver incursiones en las dos dimensiones con Sonic 4 Episode I y II, Sonic Rush o el grandioso Sonic Mania,  creado por «fans» junto al Sonic Team y que resultó ser uno de los mejores juegos de la franquicia como mínimo de los últimos años.

Después de Sonic Forces, título que tuvo sus luces y sus sombras pero que resultaba continuista bajo la fórmula denominada «Boost», Sonic Team ha decidido pegar el mayor viraje a la franquicia en muchos años con Sonic Frontiers, quizá debido al agotamiento de la fórmula antes mencionada (que no desaparece del todo) o quizá debido al nuevo público que llega debido al éxito de las adaptaciones cinematográficas, pero desde luego en este juego se nota una ambición que faltaba en anteriores títulos de la mascota de Sega, algo muy de agradecer.

Sonic Frontiers nos lleva a las StarFall Islands, un grupo de cinco islas que esconden una historia que se remonta a miles de años, anterior a todo lo conocido en la franquicia hasta ahora. Después de un accidente, Sonic despierta solo en una de las islas, sus amigos desaparecidos y la misteriosa Sage siguiendo su pista, con motivos desconocidos tanto para nuestro querido erizo como para el jugador. A partir de aquí iremos explorando las diferentes islas mientras buscamos la manera de rescatar a Tails y compañía y vamos descubriendo más sobre la ancestral raza que poblaba dicho lugar.

Si bien Sonic nunca ha sido adalid de la mejor narrativa jamás escrita, la franquicia sí que ha contado con argumentos muy interesantes y solventes en los Sonic Adventure o Unleashed ( pueden gustar más o menos, pero las historias tenían un buen nivel). Estas historias se fueron simplificando en posteriores entregas y pese a que Forces trataba de traer un poco más de seriedad a la mesa, se quedaba a medias en todos los aspectos.

Para Sonic Frontiers, se ha tenido una idea muy inteligente, y es contar para el guion, además del propio Sonic Team, a Ian Flynn. Los que seáis fans de Sonic sabréis de quién hablamos, pero para los que no estén tan puestos en el universo del erizo, decir que Ian Flynn se ha encargado de escribir guiones para los cómics oficiales de Sonic tanto en la etapa de Archie como en la actual en IDW, creando historias de muy alto nivel en las viñetas.

Esto se nota en la historia de Frontiers, no me atrevería a decir si es la mejor de la franquicia hasta el momento, pero lo que sí os puedo asegurar es que es la mejor escrita. En cada línea de diálogo tanto principal como secundaria se denota el amor del escritor hacia la franquicia y todas sus entregas. Encontraremos referencias a prácticamente todos los juegos de la saga, tomando en cuenta los eventos de cada uno de ellos no para la trama principal pero sí para ver como Sonic ha crecido junto a nosotros, los jugadores. Además, la historia principal también es muy interesante y ofrece momentos muy épicos e incluso emotivos, arrojando nueva información sobre elementos primordiales que están desde la primera entrega, en la ya lejana Mega Drive.

Jugablemente Sonic Frontiers apuesta por lo que sus desarrolladores han llamado «Zonas abiertas», minimundos abiertos en forma de islas de gran tamaño que podremos explorar de manera libre controlando a Sonic en todas las direcciones, alejándonos de la linealidad de entregas anteriores. Esta parte será donde más horas pasaremos jugando y es que para avanzar en la trama deberemos ir encontrando las Chaos Emeralds así como hablando con los diferentes personajes. Para realizar estas acciones normalmente deberemos recolectar algún tipo de objeto, que se suele encontrar explorando los entornos. Explorando también encontraremos objetos que nos permitirán subir nuestro ataque, defensa, velocidad y límite de Rings, dándole un pequeño componente rolero que realmente no aporta demasiado pero tampoco perjudica la experiencia.

Explorar cada una de las islas puede llevarnos una buena cantidad de horas, más aún si queremos completarlas al 100%, ya que estas estarán plagadas de raíles y zonas plataformeras tanto en 3D como en 2D que deberemos completar para conseguir alguna recompensa, todo en tiempo real y sin pasar de una pantalla a otra, por lo que la jugabilidad se siente extremadamente fluida y nos dará la sensación de que cada vez que decidamos ir en cualquier dirección, encontraremos cosas por hacer. Contamos también con algún que otro pequeño minijuego que va desde llegar a x punto en un tiempo determinado, chutar un balón o un pseudo Tetris, entre muchos otros.

Y es que si algo derrocha Sonic Frontiers es ambición por incluir contenido de todo tipo, esto hace que no todo funcione igual de bien, claramente hay islas mejores que otras y secciones donde el erizo no se controlará de manera tan precisa como querríamos, pero en general hay un buen trabajo en este sentido, teniendo en cuenta que es el primer intento de la compañía de realizar algo así.

Sonic Frontiers además tiene sistema de combate basado en combos, con elementos de Hack&Slash o fijado de cámara a lo Dark Souls o The Legend of Zelda. Este sistema es algo simple y se basa en realizar diferentes pulsaciones ( que podremos practicar en un simulador) y que iremos aprendiendo en un árbol de habilidades ( que se antoja algo pequeño). Estos combates no serán especialmente difíciles pero sí requerirán un poco de práctica y aprendernos el patrón de cada enemigo. Todo esto culmina en unas batallas contra jefes que si bien son pocos son totalmente espectaculares, el primer jefe del juego, por poner un ejemplo, está a la altura en cuanto a intensidad y epicidad a la de cualquiera de los jefes finales de anteriores juegos de la saga, por lo que haceos una idea de cómo avanzará la cosa.

Por otro lado, la otra sección importante del juego no es el minijuego de pesca de Big ( como todo mundo abierto tiene que tener su parte de pesca) si no los niveles del ciberespacio. Estos niveles si retoman la jugabilidad «Boost», recordando a Sonic Forces o Generations, eso sí, esta vez solo con Sonic Moderno, e intercalan partes en 3D lineales con otras más plataformeras en 2D siendo nuestro objetivo llegar a la meta en el menor tiempo posible para conseguir el mejor rango además de otras misiones como llegar con un determinado número de anillos o consiguiendo todos los anillos rojos que estarán escondidos por toda la zona, obligándonos a repetirlos más de una vez si queremos aprendernos todos sus secretos, motivo por el cual suelen ser niveles muy escuetos, llegando en raras ocasiones a los 2 minutos de duración.

Estos niveles tienen luces y sombras, sobre todo porque reciclan assets a mansalva de escenarios de Generations como Green Hill o Chemical Plant, sintiéndose muy poco variados a nivel artístico, ya que veremos estas estéticas en decenas de niveles, pese a variar el diseño de los mismos o la iluminación. Ahora bien, quiero destacar algo que me parece soberbio en estos niveles, y que es algo que está hecho para los fans de Sonic y probablemente no todos nos daremos cuenta de esto.

Los niveles del Ciberespacio utilizan las memorias de Sonic y compañía para construir los escenarios, y esta podría ser la excusa perfecta para justificar la reutilización de elementos, pero también hacen otra cosa a lo que yo personalmente he llamado diseño por Deja-vu. Pensareis en la locura sin sentido que acaba de decir servidor, pero os lo explico muy rápido. Pese a ver siempre los mismos escenarios, cada pantalla recoge elementos sutiles en alguna ocasión y más directos en otras de niveles de otras entregas, pero no lo hace de manera visual como por ejemplo Sonic Generations, donde el fanservice era más claro y directo. En esta ocasión podemos estar recorriendo una zona y si hemos jugado a anteriores títulos poder reconocer ciertas secciones, pero muchas veces no tendremos claro a qué juego pertenecen o si siquiera pertenecen a estos mismos, creando una sensación de Deja-vu que creedme, es muy satisfactoria y es algo único en la franquicia.

Por poneros un ejemplo rápido , en un nivel recorrí un par de zonas donde claramente sabía que el diseño estaba basado en otro juego, pero no tenía claro si era Sonic Adventure 2 o Sonic Heroes, dejándote esa sensación onírica que dejan los recuerdos lejanos, y que el juego trata literalmente, por lo que no son casualidades.

Pasando al apartado técnico, Sonic Frontiers hace uso del motor Hedgehog Engine 2, resultando bastante vistoso y muy fluido, funcionando a 60fps en todo momento en la versión de Playstation 5, la que he podido jugar. Por otro lado, es un juego que podría ser aún más bonito con un poco más de trabajo, ya que a veces sufriremos bastante popping que seguramente se  evitaría con algo más de trabajo de optimización. Por lo demás contamos con un modelo de Sonic que si no es el mejor, está entre los mejores de las entregas en tres dimensiones y los entornos abiertos dejan panorámicas por las que echamos en falta un modo foto con las que hacer nuestras propias capturas.

Eso sí, donde no falla nunca Sonic es en su apartado sonoro. Por una parte contamos con doblaje a varios idiomas, incluido el castellano, siendo este de muy buena calidad, al igual que el inglés, donde repiten voces habituales, todo ello acompañado de textos en completo español para no perdernos ni un detalle de la historia.

La música corre a cargo de Tomoya Ohtani, donde mezcla composiciones tranquilas y relajadas para la exploración por las islas, toques algo más épicos para los combates y temas increíblemente cañeros para los jefes, siendo todos de una calidad excelente. Es en el ciberespacio donde Tomoya se permite experimentar en este apartado, encontrando todo tipo de géneros, temas más electrónicos, voces etéreas y mucho sintetizador. Habrá temas mejores y peores , pero la cantidad de canciones es abrumadora, conformando una de las mejores bandas sonoras del año sin lugar a dudas.

Conclusión

Sonic Frontiers es un juego que marca claramente una transición. Una vez has probado el mundo abierto ya es difícil volver atrás y si bien le falta pulido y se nota que es el primer paso de un camino mucho más largo, han logrado conseguir un juego muy divertido, lleno de contenido y que no deja la sensación de coitus interruptus que dejaba Forces ( que no es mal título, pero se sentía todo demasiado reciclado y breve).

Sonic está viviendo una edad dorada gracias a las películas, cómics y series que se vienen y es una alegría saber que su faceta principal, los videojuegos, está tomando un enfoque muy bueno, así que estamos deseando volver a correr junto al erizo azul con el que crecimos, y SEGA parece que también está dispuesta a ello, por lo que nos daremos unas cuantas vueltas por Starfall Islands de mientras.

Sonic Frontiers

59,99€
7.9

Historia

7.4/10

Jugabilidad

7.5/10

Gráficos

7.4/10

Sonido

9.0/10

Diversión / Duración

8.0/10

Pros

  • Sienta bien el cambio de aires jugable.
  • La música es para quitarse el sombrero.

Cons

  • Falta de variedad artística en los niveles del ciberespacio.
  • Popping y controles que a veces necesitan algo más de pulido.