Análisis | The Silent Swan

The Silent Swan ya puede jugarse para PlayStation 5 y PC a través de Steam. ¿Qué misterios nos aguardará la aventura? ¿Qué podemos esperar de la obra debut de Praenaris? 

Analizamos la ópera prima del estudio patrio Praenaris, un walking simulator de oscura ambientación que lleva por nombre The Silent Swan. El título se gestaba durante la etapa universitaria del equipo, conocido en aquella época como Studio Circense y en 2022 consiguieron formar parte del programa Games Camp bajo el ala de PlayStation Talents.  

Debo deciros que tenía muchas ganas de ver el juego terminado después de probar la demo que me dejó con un sabor de boca un tanto agridulce. Hay muy buenas ideas detrás del proyecto, buena ambientación y una historia de fondo que te invita a seguir explorando por su basto mundo, pero también fui testigo de algunos problemas técnicos y una mala iluminación.  

Bajo el silencio aterrador de un mundo desolado, The Silent Swan nos presenta a Mirov, un hombre que viaja 17 años en el tiempo después de hablar con su mujer y quedarse dormido. Pronto nos daremos cuenta de que aquel lugar que conocimos, ha caído en el olvido. Caminos que llevan a ninguna parte, estructuras metálicas en el horizonte y prados verdes serán testigos de la odisea de nuestro protagonista por volver a su hogar, encontrar a su amada y descubrir qué le pasó a la humanidad. 

Desde los primeros compases del juego, nos invadirá la sensación opresiva de estar completamente solos en el mundo, en este sentido la ambientación está muy bien construida y nos arrastrará de lleno a la aventura. Las carreteras que conectaban la ciudad y eran transitadas, ahora son el cementerio de decenas de vehículos que fueron abandonados a toda prisa por sus dueños ante algún tipo de peligro. Al silencio más absoluto nos acompañará la delicada partitura interpretada a piano por Francisco Arroyo, el ruido seco de las estructuras de metal al liberarse de la tensión y los pensamientos de nuestro protagonista que nos servirá para hilvanar algunos puntos de la trama. A todo ello y de vez en cuando, un personaje misterioso nos hablará por radio arrojando algo de luz sobre nuestros recuerdos y la realidad, hasta el punto de crearnos un conflicto existencial, un velo que tendremos que levantar a través de nuestras propias experiencias, documentos y cartas que vayamos encontrando. No es especialmente necesario encontrar toda la información, pero sí fundamental si lo que buscas es añadir valor a la historia y lograr comprenderla, de lo contrario es posible que al finalizar el juego tengas una visión global de la misma un tanto difusa. A todo ello, The Silent Swan tiene una duración aproximada de 2 horas, como siempre, dependiendo de lo que cada jugador dedique a la exploración o a la resolución de los acertijos que se presenten. No es una aventura especialmente difícil, pero en algunas zonas con mayor libertad puedes quedarte atascado como me pasó a mí en más de una ocasión, es por ello que recomiendo encarecidamente activar las funciones de ayuda que ofrece el juego. Por otro lado, el título no tiene autoguardado por lo que antes de cerrar el juego tendrás que encontrar una serie de campanitas con las que poder salvar la partida.  

En cuanto a la jugabilidad y mecánicas The Silent Swan coge prestados los controles de los walking simulator. De esta forma podremos andar, correr, saltar e interactuar con objetos como pulsadores, palancas o documentos. Llegados a este punto ya sabréis que el juego es bastante amplio y andar o correr se hace bastante tedioso al principio, pero os gustará saber que llegados a un punto de la partida podremos montar en bicicleta y más adelante, también podremos realizar viajes rápidos mediante dirigible, algo que se agradece enormemente.  

Ya os he hablado de las bondades de la ambientación y su sensación opresiva de tintes melancólicos. El escenario, sobre todo cuando llegas a la ciudad, es un deleite arquitectónico, las estructuras grisáceas se alzan entre la niebla y no dejas de preguntarte cuál fue el destino de las personas que habitaron el lugar. El contraste de la naturaleza con el estilo urbanístico consigue transmitir muchas emociones e invita a la meditación. No obstante, hay muchos otros puntos que están por pulir, desde la iluminación, zonas de la ciudad completamente vacías, popping de elementos que cargan conforme te acercas, el puntero para pulsar interruptores es demasiado pequeño y en ocasiones no se ve, incluso he llegado a caerme en zonas quedándome atrapada. Todos aquellos fallos que encontré en la demo jugable siguen muy presentes en la versión final y aunque la premisa promete, acaban por enturbiar la experiencia.  

The Silent Swan llega en varios idiomas incluido el catalán, versión que escogí para jugar y realizar este análisis. He de decir que, si bien en su gran mayoría es correcta la traducción, hay algunas líneas de texto que son un sinsentido. No es lo habitual pero cuando lo ves chirría bastante.  

The Silent Swan es una aventura con excelentes ideas. El diseño arquitectónico de las murallas, la ciudad en general y sus torreones es maravillosa al igual que la ambientación y el apartado sonoro que invita a la reflexión. La trama atrapa al jugador desde el primer minuto, sin embargo, se ve empañada por el diseño de algunos apartados que parecen inacabados.  Los comienzos no son fáciles para nadie pero viendo el talento de Praenaris a la hora de crear escenarios con tan buen gusto estoy segura de que van a sorprendernos en un futuro próximo. Atentos a su próxima obra Project Umbra. 

The Silent Swan

29,99€

6.7

Historia

7.0/10

Jugabilidad

6.0/10

Graficos

6.5/10

Sonido

8.0/10

Duración / Diversión

6.0/10

Pros

• Buena ambientación
• Diseño arquitectónico
• Banda sonora acorde al tono de la aventura

Cons

• Apartado técnico por pulir