Reseña | Batman: Yo soy suicida

Tom King y el dibujante español Mikel Janín nos presentan un cómic que busca revivir la grandeza de Bane como villano principal de Batman.

Como siempre mencionamos al inicio de estas reseñas de superhéroes tan conocidos y con tanto bagaje a sus espaldas, muchas son las obras e iteraciones que ha tenido Batman desde su nacimiento en el año 1939. Desde las ligeras historias de los primeros años a las oscuras de finales de los 80 pasando por todo tipo de apariciones fuera del cómic, no hay nadie a día de hoy que no conozca de la figura del multimillonario Bruce Wayne.

En 2016 Tom King tomó las riendas de la serie del Hombre Murciélago y hoy hablamos de uno de los arcos argumentales de esa etapa que abarcan del número 9 al 15 de la serie regular y que nos cuentan una aventura autoconclusiva donde Batman y un equipo a lo «Escuadrón Suicida» se infiltran en la prisión de Santa Prisca para buscar a alguien que está en «posesión» de Bane. Un Bane que pierde en masa muscular al no estar utilizando el veneno que le caracteriza, pero que sigue siendo imponente tanto por su inteligencia como por la manera en que Mikel Janín lo dibuja.

Citando la contraportada: » Bane trama algo y Batman está dispuesto a averiguar qué es. El Hombre Murciélago lidera una arriesgada misión junto con unos aliados inesperados. ¿El objetivo? Infiltrarse en las entrañas de la prisión de Santa Prisca, el trágico hogar de Bane, y obtener algunas respuestas. Aunque para eso necesitará la ayuda de sus propios enemigos y de cuestionables compañías como la de Catwoman.

Esta edición especial del arco argumental «Yo soy suicida» recoge la asfixiante historia con la que el guionista Tom King y el dibujante Mikel Janín llevaron al límite las habilidades de Batman. Incluye una extensa entrevista con Janín y material adicional inédito, cedido y revisado por el propio creador español.

En este caso la trama se cuenta como un puzle, al principio puede que no entendamos que está pasando o por que Batman reúne al grupo que reúne y busca lo que busca, pero conforme vayamos leyendo iremos atando cabos hasta reunir todas las piezas necesarias para seguir una historia muy interesante.

Además, destacar, por encima del propio Hombre Murciélago, el tratamiento que Tom King y con la ayuda del dibujo de Janín de Bane, despojado de su estética y capacidades características, pero siendo tan, o más, imponente que nunca, su relación con Batman y como están escritos los diálogos, sintiéndose profundos pero a la vez enigmáticos, haciendo que el lector se implique en cada una de las viñetas y páginas.

Páginas dibujadas con un uso de las sombras excepcional y repletas de «Splash Pages» con un detalle inusitado, en esta ocasión en blanco y negro dada la edición que tratamos hoy, que ayuda a darle un toque único a la historia, en especial a Bane, siempre entre sombras.

La edición de ECC en esta ocasión es especial, ya que esta vez se ha optado por presentar la historia en escala de grises, supervisada por el propio Mikel Janín, presentándola tal y como él la dibujó, antes de que pasara por el toque del color. Estamos ante un volumen único conformado por 128 páginas en formato cartoné cosido con hilo que incluyen todos los números de este arco argumental una galería de portadas y bocetos así como una completa entrevista al dibujante español, material adicional muy interesante para conocer más los entresijos del mundillo y de este cómic en concreto.

Batman: Yo soy suicida vuelve a ser una lección de narrativa por parte de Tom King, que con el dibujo de Mikel Janín conforman un tomo que si bien no es muy extenso, nos cuenta una historia muy interesante, un puzle a resolver, y que logra darle a Bane un protagonismo que hacia mucho tiempo no veíamos, además, la edición única de ECC en escala de grises puede hacer las delicias del fanático del Hombre Murciélago.