Super Meat Boy Forever ya se encuentra disponible en PS4 y Xbox One

Super Meat Boy Forever ya se encuentra disponible en PS4 y Xbox One

16 abril 2021 0 Por Guillem Sanchis

Debuta en la PS Store por 15,99 euros.

Super Meat Boy Forever tiene lugar unos años después de los acontecimientos de Super Meat Boy. Meat Boy y Bandage Girl han vivido felices y libres del Dr. Fetus durante varios años y ahora tienen una niña preciosa llamada Nugget. Nugget es la alegría personificada y lo significa todo para Meat Boy y Bandage Girl. Un día, mientras nuestros héroes estaban de pícnic, el Dr. Fetus se acercó sigilosamente, dejó inconscientes a Meat Boy y Bandage Girl con una pala ¡y secuestró a Nugget! Cuando nuestros héroes despertaron y vieron que Nugget había desaparecido, sabían a quién debían buscar. Se crujieron los nudillos y decidieron que no pararían hasta recuperar a Nugget y darle al Dr. Fetus una importantísima lección. Una lección que solo se puede enseñar con puñetazos y patadas.

El reto de Super Meat Boy regresa en Super Meat Boy Forever. Los niveles son brutales, la muerte es inevitable y los jugadores tendrán esa maravillosa sensación de éxito al superar un nivel. Los jugadores tendrán que correr, saltar, dar puñetazos y patadas para abrirse paso por entornos conocidos y mundos totalmente nuevos.

¿Hay algo mejor que jugar a Super Meat Boy Forever hasta llegar al final? La respuesta es sencilla: jugar a Super Meat Boy Forever varias veces y tener nuevos niveles cada vez que empieces de nuevo. Los niveles se generan de forma aleatoria, y cada vez que se completa el juego aparece la opción de volver a jugar desde el principio, generando una experiencia totalmente nueva al ofrecer niveles diferentes con sus propias ubicaciones secretas. Hemos diseñado literalmente miles de niveles para que los jugadores los disfruten y los conquisten. Se puede jugar varias veces a Super Meat Boy Forever de principio a fin antes de ver un nivel repetido. Es una auténtica proeza de la ingeniería y un ejemplo monumental de pasar por alto los límites de la racionalidad en el diseño y la producción de un juego.